Entre los atributos destacables del Gran Concepción y que habitualmente no apreciamos cabalmente, está el papel que desempeñan los sistemas naturales en el paisaje y el acceso a esos bienes, una singularidad muy propia de la urbe penquista y, por lo tanto, no suficientemente valorada.
Las comunidades tienen una extensa historia de resistencia y organización que se remonta a épocas prehispánicas. Si bien los pilares del Plan –inversión social, emprendimiento y representación política para los mapuche– son correctos, no abordan la clave del conflicto: la tierra.
La ciudad ha reducido casi a la mitad la superficie de sus humedales, al ser rellenados para la instalación de viviendas e industrias, generando consecuencias negativas, tanto para la biodiversidad como para el desarrollo urbano.
Es esta una instancia en la cual nuestra democracia debe enfrentar una realidad dolorosa. La sociedad demanda rigor, compromiso, conocimiento y objetividad. Un debate exento de demagogia, ante un asunto de tan profundas vinculaciones éticas y existenciales.
Los municipios son el primer eslabón en la política y por eso mismo, sus integrantes son los políticos más cercanos a la gente, los que comparten en terreno muchas de las inquietudes que surgen, cuando se cuestiona el quehacer público.
La Región se encuentra con proyectos detenidos. Posiblemente, una de las tareas del nuevo intendente, sea la de convocar y acercar acuerdos para impulsarlos y dar término a la permanente presentación de opciones, que no ha hecho otra cosa que postergarlos.