Distintas ciudades en el mundo, en donde han nacido caricaturistas de fama mundial o tienen alguna relación con ellos, han aprovechado esta condición para reforzar su marca ciudad. Esa es la oportunidad que hoy tiene Concepción con Pepo, que es de Conce.
Por Luis Yáñez Morales
Periodista e impulsor de Pepo es de Conce
Una marca ciudad es su propio nombre asociado a una serie de atributos exclusivos y singulares por los que se la puede identificar, reconocer y diferenciar respecto a otras. Esta marca es un verdadero símbolo de su personalidad y se asocia una serie de activos y recursos urbanos propios y a valores con una significativa capacidad de atracción.
¿Qué es Concepción?: Concepción es campanil, es teatro, es río, es murales, es arco, ¿cierto?… pero, ¿y por qué nos cuesta tanto asociarla con personas? En Chillán hacerlo es fácil, hay un culto a sus personalidades, pero no ahondaremos en ese tema por ahora.
Pepo es de Conce y de raíces familiares bien profundas con esta tierra. Por lo mismo, ¿cómo podríamos aprovecharnos de su fama para potenciar la marca ciudad “Concepción”?
A 30 minutos de Bruselas, en la ciudad de Lovaina, se encuentra el Museo Hergé dedicado al caricaturista belga Georges Remi. Cuenta con 3 plantas y 8 salas de exposiciones sobre la vida y obra del padre de Tintín y Milú. Recibe a 70 mil personas anualmente interesadas en saber más de la vida del autor de un personaje que ya tiene 90 años.
A otra escala es la experiencia asociada a la figura de Popeye. En la pequeña ciudad de Chester en Illinois, Estados Unidos, le rinden honores al autor del marino come espinacas más famoso del mundo, Elzie Crisler Segar, quien nació en ese pueblo. La ciudad cuenta con almacenes, museos, estatuas, ligadas a la figura de Popeye y a la de sus personajes. Incluso hay un festival que, año a año, atrae al turista.
En Buenos Aires, Argentina, Mafalda, el personaje más querido por los latinoamericanos junto a Condorito, encabeza a los personajes del Paseo de la Historieta, circuito callejero que rinde homenaje a los mejores personajes de las tiras trasandinas. ¡Quién se puede resistir a sacarse una foto con Mafalda sentada en el banquito de San Telmo!
En nuestro país, Cumpeo, por el solo hecho de aparecer en la historieta, logró apropiarse exitosamente de la imagen de Condorito. Hay locales comerciales, recorridos, murales y estatuas que recuerdan la caricatura. El año pasado 30 mil personas se reunieron en la séptima gran cumbre de Condorito, lo que anualmente activa el comercio y el turismo de la comuna de Río Claro.
Concepción podría hacer suya la fama y talento de Pepo con una estrategia inteligente que la ponga en el mapa del turismo patrimonial latinoamericano. Una estatua de Pepo y/o de Condorito, una plaza temática, un hito en donde él nació, un museo moderno que mezcle todas sus creaciones bastaría para activar el interés. La familia está dispuesta a que la ciudad sea la albacea de sus obras; el municipio y la gobernación han mostrado gran interés, entonces ¿qué falta? Lo que falta es una decisión política clara y los recursos económicos para transformar estas ideas en algo concreto, que le entregue un valor extra a Concepción como marca ciudad, de la mano del innegable talento de Pepo, que es de Conce.
Esta historia continuará…
(Artículo parte de la campaña ciudadana fb.com/PepoesdeConce)