En 2009, la Orquesta Sinfónica UdeC le hizo un homenaje, con un repertorio dedicado solo a su obra. Además, musicalizó el himno de la UBB.
“¿Sabe? Este último tiempo he estado dedicado a revisar material. Lo que pasa es que estoy preparando mi partida”. En 2009, Vicente Bianchi comentaba esto a Fernando Alarcón, periodista de Corcudec que lo entrevistó por el homenaje que le realizó la Sinfónica UdeC, en abril de ese año. Mucho tiempo pasó, pero finalmente ayer se terminó la eterna obra de este compositor, uno de los más destacados de la historia chilena, que falleció a los 98 años.
En esa trayectoria, su camino varias veces se cruzó con la Región. Una de las menos conocidas debe ser su participación en el himno de la Universidad del Bío Bío. La música es de su autoría, que se unió a los versos de Germán Becker Ureta.
Y quizás la más importante fue el tributo que se mencionó al inicio. En abril de 2009, en el Teatro UdeC y bajo la dirección de Víctor Hugo Toro, la Orquesta Sinfónico homenajeó el trabajo de Bianchi, con un programa que incluyó sus creaciones “Tríptico Sinfónico, Escenas Campesinas”; “Cuando y Refalosa”; “Éxitos de Donato Roman Heitman”; “Los amores de una pollita”; “Abejorros”; “Rin y Pericona”; “Tonada rítmica”; “La Tranquera”; “Momento andino”, y “Trote y cachimbo”.
En la entrevista realizada por Fernando Alarcón, el músico destacó su nexo con la Orquesta UdeC. “Tengo hermosos recuerdos. Dirigí dos veces allá, hace años y fue fenomenal, así es que estoy muy agradecido de este homenaje”, comentaba.
Además, contó que siempre su camino estuvo ligado a esta disciplina. “Fui influenciado por mi madre que tocaba el piano y estudié en el Conservatorio de Música (…) Desde siempre me sentí entusiasmado con la música nacional. Soy chileno y esto se impregna y se advierte en la vida. Este es un país maravilloso y cuando joven lo recorrí casi pueblo por pueblo. Lo chileno me absorbió”.
En ese momento, en 2009, también advertía el poco espacio que se le daba a las melodías y creaciones de origen nacional.
“Hoy ocurre lo mismo que hace 50 o 60 años. Antes, porque habían pocas grabaciones chilenas, y hoy porque a nadie le interesa. La música chilena no se oye. Yo recuerdo que porfié con los sellos de la época porque la música nacional había que imponerla, peleé más de un año, hasta que les llevé la tonada de Rodríguez y la respuesta fue positiva. Con eso se abrieron las puertas para otros chilenos que también quisieron grabar. En el fondo, todos son hijos de ese Manuel Rodríguez”, señaló Bianchi en esa entrevista.