Al inicio de la pandemia, entre los no especialistas, el debate fue intenso. Hoy nadie cuestiona los positivos resultados de las medidas restrictivas a la movilidad.
Mas que un derecho para los medios de comunicación y los periodistas, la libertad de prensa es una garantía de que la sociedad podrá acceder a información de todos los ámbitos, sin coerción ni presiones de carácter político, económico, religioso u de otra índole.
En Chile, el debate estuvo centrado en la productividad, y se ha recordado que ese punto es el “Talón de Aquiles” para el país. De hecho, para las economías latinoamericanas y caribeñas.
No deja de sorprender el hecho de que los adultos mayores son el grupo etario que más trabaja en la informalidad en la Región del Biobío.
Los sondeos, encuestas y estadísticas deben ser interpretados adecuadamente. De lo contrario, pueden desinformar, más que entregar información útil y veraz.
Si bien en los últimos días las cifras de la pandemia han disminuido a nivel local, no hay que relajarse. Se debe mantener el autocuidado personal y la responsabilidad ciudadana.