Son varias las interrogantes que podemos plantearnos frente a este problema y que debemos atender con carácter de urgente.
FLOR WEISSE NOVOA
Dipudada UDI del Distrito 21
Hace pocos días la Región del Biobío recibió una noticia preocupante, el ausentismo preescolar en la región alcanza el 50%. Esta situación se ha agravado en los últimos años y se agudizó durante y después de la pandemia.
El problema no sólo afecta a los preescolares, sino además alcanza a otros niveles. En efecto, 1 de cada 3 estudiantes posee una inasistencia inferior al 85%. La asistencia escolar, además de constituir una condición clave para el desarrollo del conocimiento, habilidades y actitudes permite el desarrollo de una serie de condiciones, entre otras las socioemocionales.
Por lo anterior vale la pena detenernos y saber qué esta ocurriendo. ¿Por qué razón las familias no están llevando a sus hijos(as) a kínder y prekínder?. Existirán mejores alternativas, que suplen la enseñanza preescolar?. Se requerirá que la atención se fortalezca en las salas cunas, para permitir que los padres trabajen tranquilos y así fomentar el hábito de la asistencia escolar?.
Son varias las interrogantes que podemos plantearnos frente a este problema y que debemos atender con carácter de urgente, si nos preocupan nuestros niños/as. En el caso de los niveles superiores hay una situación adicional, que ha sido motivo de preocupación y que las políticas públicas deben considerar.
La salud mental de nuestros niños/as y adolescentes se vio visiblemente afectada, con la pandemia. La ansiedad, la depresión y las autolesiones han aumentado especialmente, en este grupo de la población, que necesita ayuda urgente, pero también de programas y de recursos económicos que los sustenten.
No será entonces, que se requiere abordar el problema del ausentismo escolar con una mirada integral, con una mirada que nos sólo coloque el foco de atención en los establecimientos educacionales, sino que además, sea capaz de extenderlo al entorno familiar y social.
Desde el Congreso Nacional estos temas nos preocupan y nos abocamos a entregar soluciones legislativas que contribuyan a mejorar las condiciones de vida, a procurar el bienestar socioemocional de nuestros niños, niñas y jóvenes que son el presente y futuro de nuestro país.