Opiniones, propuestas, llamados, querellas. Mucha variedad de formas para enfrentar las dificultades de una gastada Prueba de Selección Universitaria, que parece vivir su último año de aplicación.
Los problemas asociados con la zarandeada Prueba de Selección Universitaria continúan manifestándose y en ascenso. Como se sabe, a la interrupción organizada por agrupaciones estudiantiles, la cual afectó a miles de estudiantes en varios puntos del país, junto con la filtración de la prueba de Historia, que impidió rendirla a todos los que se habían inscrito para hacerlo, se suman nuevos intentos por obstaculizar su reprogramación el próximo lunes y martes, días en los cuales se pretende completar el proceso para quienes fueron impedidos de realizarla anteriormente.
En las últimas horas, se ha conocido que la situación se empieza a transformar en un problema para el Consejo de Rectores (Cruch); una dificultad a la que no se le puede hallar una solución que deje satisfechos a todas las partes, pues cualquier medida compensatoria, en ningún caso beneficiará de modo parejo a todos los estudiantes afectados.
Por su parte, el gobierno también está en el ojo del huracán al impedir la rendición de la prueba a 86 estudiantes, debido a su participación en las manifestaciones que imposibilitaron que la PSU se aplicara en forma normal. Ante ello, la Ministra de Educación, Marcela Cubillos, afirmó que “ojalá, si entre los jóvenes hay alguno que haya cambiado de opinión y que hoy día quisiera ejercer su derecho a dar la prueba, puedan apelar y garantizar que no van a repetir la conducta… anterior”.
Sólo ayer hubo nuevos llamados a protestar. En nuestra región, una nueva instancia estudiantil creada en estas últimas semanas, la Mesa Secundaria de Concepción, y también las federaciones estudiantiles de las universidades con campus en Concepción han levantado convocatorias en este sentido. Y es que secundarios y universitarios coinciden en el punto de continuar rechazando la aplicación de la PSU, si bien los primeros plantean un imposible como es garantizar un cupo en cualquiera de las universidades o institutos, privados o estatales, para cada estudiante que se inscribió para rendir la PSU.
Opiniones, propuestas, llamados, querellas. Mucha variedad de formas para enfrentar las dificultades de una gastada Prueba de Selección Universitaria, que parece vivir su último año de aplicación. O el último intento por continuar siendo el sistema de selección universitaria para el ingreso 2020 a las distintas instituciones de educación superior.