Con siete votos a favor y seis en contra, la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados aprobó una indicación que establece un nuevo monto base de $550 mil brutos, en el marco del proyecto de Ingreso Mínimo Garantizado.
El cambio dista de la iniciativa propuesta por el Ejecutivo que busca elevar el ingreso mínimo a $350 mil brutos por vía de un subsidio fijado en $49 mil líquidos.
La nueva indicación propone elevar el monto del aporte gubernamental, junto con focalizarlo a aquellos trabajadores que laboren en empresas cuyo tope de ventas anual sea de 75 mil UF, consignó La Tercera.
De esta manera, la Comisión de Trabajo pretende fijar para todas las empresas -sin distinción de tamaño- un nuevo mínimo del ingreso en $550 mil brutos. Así, toda persona que gane menos de dicha cifra y que trabaje en una pyme recibirá el subsidio, en cambio, las grandes empresas deberán costear la diferencia hasta alcanzar los $550 mil. En otras palabras, un nuevo salario mínimo.
Dentro de este marco, se zanjó que el tope máximo del subsidio será de $199 mil líquidos.
Tras la votación particular, el ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel, calificó “de irresponsable la indicación”, debido a que “la Constitución actual establece que la iniciativa en materia de gasto es exclusiva del Presidente de la República”.
Asimismo, Sichel manifestó estar preocupado “cuando la admisibilidad de un proyecto pasa a ser como un juego”, añadiendo que “no solo me preocupa decir que es inadmisible (…) sino que me parece irresponsable que esa decisión se tome, porque se tiene una mayoría dentro del Congreso”.