El Servicio de Impuestos Internos (SII) dio inicio a un plan piloto que busca – en una primera etapa – analizar y conocer cómo opera el mercado de avisos pagados en las cuentas personales de los denominados influencers.
El objetivo de la iniciativa es que esta suerte de celebridades de las redes sociales, incorporen en su declaración de renta los ingresos percibidos por esta vía.
Si bien los aludidos han asegurado que pagan sus impuestos y que están abiertos a colaborar con el SII, ¿cómo funciona el mercado de influencers en Chile?
De acuerdo a lo informado por La Tercera, existen diversos mecanismo de vinculación comercial entre un influencer y la empresa que quiere publicar su producto en el país.
Uno de los métodos más utilizados es el pago mediante una boleta de honorarios por un número determinado de publicaciones. Por otra parte, también las compañías ofrecen una negociación bajo contrato, sobretodo cuando las campañas son a largo plazo. En ambos casos, las partes acuerdan el monto, términos y condiciones del trabajo a desarrollar.
El socio de Astur Consultores, Eduardo Elgueta, comentó que “el SII lo está llevando de manera correcta. En general, se ve bastante desconocimiento de las personas respecto a su obligación de declarar impuestos por este tipo de servicio”, quien añadió que “este tema se discute en Europa desde hace un tiempo, y fueron países como España e Inglaterra quienes tomaron la batuta respecto a la tributación y fiscalización de este tipo de servicios”.
Por su parte, el socio de Bustos Tax & Legal, Claudio Bustos, afirmó que le “parece muy pertinente y necesario que se les fiscalice, ya que toda persona residente en Chile debe tributar por la totalidad de sus rentas”. Sin embargo, manifestó que “no me parece que sea un proceso fácil de fiscalización, principalmente porque estamos hablando de personas que perciben rentas de empresas extranjeras, probablemente YouTube u otra plataforma similar”.
En tanto, Cristián Mena, socio de Mena & Alessandri Asociados, explicó que “en ausencia de un tratamiento específico, habría que recurrir a reglas generales, distinguiendo entre quien recibe el pago, es decir, el influencer, o quien paga la estrategia publicitaria, la empresa o marca en particular”.
En países desarrollados como Estados Unidos o Inglaterra, los gobiernos ya tomaron medidas para regularizar este tipo de actividad. En el caso de EE.UU., es la Comisión Federal de Comercio (FTC) la encargada de aclarar a los consumidores si un influencer emite una opinión favorable real o pagada sobre un producto. En paralelo, en el Reino Unido existe la Advertising Standards Authority (ASA), organismo que vela por hacer cumplir la ley de protección del consumidor en cada caso que una marca pague, obsequie o entregue algún otro beneficio por una publicación.