Para los expertos la situación obedece a los bajas pensiones, más que al hecho de querer laborar por gusto. A saber: una jubilación promedio en la zona no supera los $150 mil.
Hace unos días, el INE Bío Bío entregó las cifras de desocupación, la cual alcanzó un 7,2%, mientras que la de ocupación lo hizo en un 5,7%.
Esto, traducido, quiere decir que en los últimos 12 meses hay 41.070 nuevos trabajadores.
Al analizarse los datos desagregados, se reveló que por rango etario los adultos mayores de 65 años o más que desempeñan labores aumentaron.
De acuerdo al INE Bío Bío, estos lo hicieron en un 13%, por lo que alcanzaron un universo de 7.070 personas.
“Los cuatro tramos etarios consignaron crecimiento en doce meses, siendo la mayor influencia el segmento de 25-49 años que aumentó 5,3%, seguido por el tramo de 50-64 años que subió 5,7% y el tramo 65 y más años en 13%”, declaró el organismo estatal.
En tanto, el tramo 15- 24 años aumentó en 0,8%. “En las mujeres y los hombres la mayor incidencia positiva se observó en el tramo 25-49 años, con aumento de 8,3% en el caso de las féminas y de 3,1% en los varones”, precisó el INE Bío Bío.
El Observatorio Laboral de la UBB-Sence, en su último informe Adulto Mayor y su Rol en el Mercado Laboral en la Región del Bío Bío (junio 2019), detalló que durante el 2018 quienes ocupaban una labor con más de 65 años llegaba al 25,6%.
El análisis también arrojó que de todos los adultos mayores de la zona, el 25,1% está ligado a actividades de servicios sociales y personales.
Un 21, 8% se desempeña en el comercio, hoteles y restaurantes. Un 13% en las industrias manufactureras. Mientras que un 11% se dedica al sector silvoagropecuario y pesca.
Seguidamente, un 8,3% se adentra en el mundo de la construcción y un 7,4% en el Transporte y Telecomunicaciones.
En dicho documento, el director del Observatorio, Luis Méndez, sugiere “ una revisión de las condiciones políticas y sociales a fin de entregar mayores posibilidades de integración, destacando, en este sentido, su incorporación laboral junto a la provisión de mayores servicios y cuidados. Un gran desafío del cual debemos prontamente hacernos cargo”.
De hecho, el Sence está aplicando un Programa y becas laborales enfocado en este segmento para que accedan a un ambiente de calidad, según ha informado su director regional, Óscar Aliaga.
“Me encantaría estar en mi casa descansando, pero la jubilación no alcanza. No hay que ser genio. Saque la cuenta de cuánto se necesita para mantener una casa con todos los gastos que implica”, se preguntó don Carlos, quien trabaja como conserje.
A saber, la VIII Encuesta de Presupuestos Familiares evidenció que en el Gran Concepción el promedio de gasto mensual ronda los $209.000 versus la jubilación regional que promedia no más de $150 mil, según datos de la Superintendencia de Pensiones.
Y lo que es más. De acuerdo al Estudio de Morosidad de Equifax y USS, en la Región, quienes tienen entre 60 y 69 años, el promedio de deuda es de $1,3 millón. En tanto, el de 70 y más, corresponde a $1 millón y fracción.
Hay que recordar que la edad de jubilación para las mujeres en Chile es a los 60 años mientras que los hombres a los 65.
De acuerdo a los expertos, los motivos por los que los “abuelitos” están trabajando de nuevo, cuando deberían estar disfrutando el retiro, obedece a las bajas pensiones.
Uno de los últimos análisis de Fundación Sol, con datos de la Superintendencia de Pensiones, revela que el promedio nacional que se recibe al mes alcanza los $158 mil.
El destacado economista Matías Godoy (detrás del exitoso libro digital “Cómo Invertir Explicado con Manzanitas”) opinó que “sin duda, el sentido común invita a pensar que se produce un aumento de los adultos mayores ocupados debido a la precaria realidad en materia de pensiones en Chile”.
Añadió que de hecho, “el sólo hecho de que existan personas ocupadas de ese tramo etario ya lo sugiere (…), que son cada vez más los adultos mayores que se ven obligados a seguir participando del mercado laboral, en circunstancias que debieran, finalmente, estar plenamente inactivos, tras una vida de trabajo”.
– Hay voces que argumentan lo siguiente: que muchos trabajan por “entretención”.
– Sin duda, debe haber gente que quiere mantenerse activa, en términos laborales. Sin embargo, y esto es una opinión, creo que estos son la minoría. Me gusta pensar que la gente ansía su jubilación para descansar.