El Teatro de la Universidad de Concepción una vez más recibió con los brazos abiertos a Jorge Drexler. El artista uruguayo, dotado de un carisma y desplante cautivador, logró llenar el coliseo un día en el que las miradas estaban centradas en la esperanza de ser parte de un torneo mundial de fútbol.
El motivo de la visita fue la presentación de su nuevo álbum “Salvavidas de Hielo”, el cual a pesar de haber sido lanzado hace pocas semanas fue coreado al unísono con sus clásicos que han seducido a más de una generación.
El concierto comenzó con una mezcla de antiguos y nuevos temas. Las bromas no se hicieron esperar, la última fecha de las clasificatorias para Rusia 2018 fue razón suficiente para que en más de una ocasión Jorge se diera una pausa y comentara con cierta picardía lo que sucedía en las canchas sudamericanas.
“12 segundos en la oscuridad” otorgó al teatro un momento de calma, una paz que fue acompañada por el respeto de los asistentes. Los coros fueron entonados con tal tenuidad que eran uno con los músicos.
El júbilo creció cuando Jorge tomó una guitarra de palo para cantar junto al público “Inoportuna” y “Fusión”. Desde ese momento lentos y bailables se tomaron el show.
El final del concierto se dio con “Quimera”, tema tocado en arpegio que cerró la tercera presentación del ganador de un premio Oscar en Concepción.
Si bien hubo canciones hito en la carrera de Jorge Drexler que no fueron interpretadas, la ovación que recibió reveló la satisfacción de los presentes frente al espectáculo brindado.