Los desafíos pasan por desarrollar mayor infraestructura a lo extenso del país y apoyo estatal para generar el necesario cambio cultural, que permita pasar de un esquema de gestión de residuos lineal a uno circular.
La iniciativa está dirigida a establecimientos que expendan alimentos, y se hace cargo de exigir alternativas ecológicas a comerciantes.
Son parte fundamental en la economía circular y en Concepción se encargan de darle nueva vida a los “desperdicios”.
El alcalde Álvaro Ortiz y presidentes de JJ.VV. llamaron a utilizar los contenedores con responsabilidad, para así no generar micro basurales en los suburbios.
El producto debe certificar que al menos 80% del envase está hecho de materiales reciclables.