Los desafíos pasan por desarrollar mayor infraestructura a lo extenso del país y apoyo estatal para generar el necesario cambio cultural, que permita pasar de un esquema de gestión de residuos lineal a uno circular.
Un importante paso da Chile en materia de reciclaje: se publicó ya en el Diario Oficial el decreto que establece metas de recolección y valorización de envases y embalajes establecido en la llamada Ley de Responsabilidad Extendida del Productor, más conocida como Ley REP, para residuos domiciliarios e industriales.
El socio de Ecoven, entidad que busca reducir o minimizar los impactos sobre el medio ambiente que se generan en el desarrollo de las actividades de instituciones públicas y privadas, Mauricio Quezada, dijo que se trata de una etapa esperada hace mucho tiempo ya que fija las metas para poder reducir el impacto en el medio ambiente.
“A pesar de que los plazos no son inmediatos va a ir aumentando los porcentajes de recuperación con el paso del tiempo”, proyectó.
Sobre las expectativas, Quezada dijo que se espera ahora un mayor compromiso de parte de los productores, que por un lado busquen disminuir la generación de materiales que puedan terminar en vertedero, así como incentivar la recolección de los envases, sostuvo.
“Hay varios desafíos que deberán sortear los productores. Por un lado, la poca cantidad de empresas que pueden procesar todos los materiales que se deberán recuperar, así como implementar programas efectivos de recuperación. El sistema de recompensa de Ecoven, es un método que puede impactar positivamente para alcanzar las metas propuestas”.
Por su parte, el socio y líder del área Medio Ambiente y Regulación de Moraga y Cía. y ex subsecretario de Medio Ambiente, Jorge Canals, explicó a Diario Concepción que a partir de la publicación del Decreto de Metas, empieza a correr el plazo de 30 meses (esto es al 2023) para que las casi 14 mil empresas que están obligadas por la Ley REP, se organicen, individual o colectivamente, y financien sistemas de gestión para recolectar primero, y luego valorizar, los millones de toneladas de residuos que se generan al año, en sus distintas sub categorías (papel y cartón, metal, plástico y vidrio).
De esta manera, dijo Canals, deben a contar de ese año empezar a cumplir las metas, para, al año 12 (esto es 2033) lleguen a tasas de reciclaje obligatorias, que van desde el 45 % en plástico, al 70% en vidrio, a niveles similares a los existentes en la Unión Europea.
“Esto implica importantes desembolsos financieros para las empresas, que desde ya se encuentran informando al Ministerio de Medio Ambiente la cantidad de envases que ponen en el mercado, en proporción a la cual se establecen las responsabilidades que deben cumplir para financiar estos sistemas que deberán responder por la trazabilidad completa de los residuos que se generan, desde su recolección en los domicilios, comercio o industria en que se generen, hasta su efectiva valorización o reciclaje material”.
Igualmente, planteó Canals, desde este momento, las empresas tienen la facultad, para pagar menos a los sistemas de gestión, de considerar criterios de ecodiseño al tiempo de producir los envases y embalajes, de forma de presentar al mercado formatos que generen menos residuos y sean altamente reciclables.
Y desde los municipios y el Estado, igualmente, empiezan a considerarse campañas masivas para instalar en la ciudadanía las capacidades para separar correctamente en origen los residuos que genera cada domicilio, de manera de garantizar el funcionamiento del régimen REP en general, explicó el ex Subsecretario de Medio Ambiente.