
Si se tiene acceso a internet y mucho interés en las STEM, estamos a un solo click de aprovechar estas oportunidades que se nos ofrece gracias a que vivimos en estos tiempos, donde la tecnología crece a pasos agigantados y la educación ofrece un mejor enfoque que en el pasado.
En estas circunstancias, compatibilizar el cuidado de los niños y “teletrabajar”, se convirtió en un gran desafío, que en mi opinión, nos invita nuevamente a reflexionar sobre lo siguientes aspectos.
Cualquier proyecto de inversión tiene un horizonte máximo de 40 años, a no ser que sus equipos y tecnologías sean sistemáticamente sustituidos.
Para hacer grandes cambios se necesita un profesorado comprometido con las exigencias de una educación inclusiva, no sexista, abierta a todos y todas.
Se trata de un desafío interesante en la que se darán a conocer resultados de investigaciones y también se profundizará la colaboración académica entre instituciones.
La economía espacial es de servicios y hardware, donde los satélites y cohetes son una fracción del negocio.