Los jóvenes intérpretes, encabezados por la batuta de Jaime Cofré, ofreció un impecable concierto que se paseó por destacadas piezas de clásicos compositores, además de estrenar dos interesantes obras de índole más contemporáneas.
Emilio de la Cerda, además de recalcar la instalación de la nueva cartera del Ministerio de las Culturas en el Bío Bío, se interiorizó de diversos proyectos en Lota, Chivilingo y el Teatro Enrique Molina, entre otros.
El texto narra a través de imágenes lo hecho entre 1973 y 1989.
Raúl Ruiz dejó un proyecto inconcluso antes de morir, que fue terminado por su viuda y montajista habitual Valeria Sarmiento. Es la ocasión perfecta para reencontrarse con la filmografía de este director.