Analistas políticos se refieren al debate generado, y hablan de ganadores, entre ellas la ex Mandataria Michelle Bachelet; y perdedores, como la administración del Presidente, Sebastián Piñera, y al Partido Comunista.
De una u otra forma la agenda ligada a los Derechos Humanos se volvió a instalar con fuerza en nuestro país, incluso, desde que la pasada presidencial (recordada es la frase que aludía “Chilezuela”). En el último tiempo el tema se acentuó con la idea del Presidente, Sebastián Piñera, de “colaborar” con el pueblo venezolano. Una ayuda que ha sido criticada por sectores de oposición más por la forma que por el fondo.
En su viaje a China, por ejemplo, el Jefe de Estados lanzó una frase para la posteridad, relativizando su postura en torno regímenes dictatoriales: “cada uno tiene el sistema político que quiere darse”.
En la actualidad Piñera afronta un momento complejo por los problemas que se han originado con el ingreso al país de ciudadanos venezolanos en la frontera con Perú.
En medio de todo esto también surgieron emplazamientos a la ex Presidenta, Michelle Bachelet, alta comisionada de las Naciones Unidas para que visitara y conociera la realidad de Venezuela. Bachelet recogió el guante y entregó un informe “contundente”, sobre la situación la nación que preside Nicolás Maduro.
“La gran ganadora es Bachelet, quien vuelve a tomar un rol protagónico en la política nacional. Pierde la derecha que había cuestionado de manera majadera el rol de la Alta Comisionada y hoy se ve forzada a respaldar su informe. Pierde el Presidente Piñera quien pese a una serie de acciones que fueron fuertemente cuestionadas contra el régimen de Maduro no logró ningún resultado”, dijo Daniel Ibáñez, presidente de la Fundación Participa.
Algunos representantes del oficialismo, como el diputado del Distrito 21, Cristóbal Urruticoechea (RN), aunque con matices han validado el escrito. “Evidencia con gran crudeza la sistemática violación a la dignidad individual y colectiva, la represión y la persecución política a opositores, atribuyendo la principal responsabilidad a la dictadura de Nicolás Maduro”.
Aunque agregó que “lamentablemente legitima políticamente al régimen de Maduro y no aclara la existencia de un presidente encargado legítimo por mandato constitucional, que es Juan Guaidó”.
Para el analista político, Felipe Vergara, el “Gobierno ha sido el gran perdedor, pues apostaban a que el informe fuera neutro y no lo fue. Además, el último informe de la comisionada de los DD.HH. contra Duterte en Filipinas terminó golpeándole más”.
Para Vergara en ciertos sectores del oficialismo “se las dieron de los adalid de la democracia y los DD.HH., pero les golpeó en la cara con el informe contra Venezuela, la abstención contra Filipinas y la llegada de venezolanos a la frontera con Perú. No lo vinieron venir y ofrecieron un asilo que no están en condiciones de cumplir”.
Para Ibáñez también “pierde el PC que decide cuestionar el informe de Bachelet desechando una oportunidad de desmarcarse del régimen de Maduro, y abre cuestionamientos de quienes fueron sus socios. También como pocas veces muestra fisuras internas, ya que el partido cuestiona informe, pero parlamentarios como Camila Vallejo lo valoran”.