Según Minsal y OMS, cada 20 minutos una persona fallece en el país por enfermedades del sistema circulatorio y el 28% de las muertes de Chile son causadas por las enfermedades cardiovasculares.
Las autoridades de salud han declarado al mes de agosto como el Mes del Corazón, el órgano cuyo funcionamiento, en estado de salud, suele pasar inadvertido y, por esa misma razón, descuidado. Es entonces necesario recapitular, tomar conciencia de su inaparente fragilidad.
Es más que una bolsa compuesta por músculos con vasos sanguíneos que entran y salen de él, en un circuito cerrado. Su funcionamiento se inicia muy temprano, a la 5ª semana de gestación. A diferencia de otros músculos, este funcionamiento no está sometido a la voluntad, sino automático, con un centro cardiorregulador situado en el cerebro, más influencia hormonal, lo que determina su intensidad y ritmo.
La altísima demanda sobre su funcionamiento determina una también alta posibilidad de afecciones y vulnerabilidades, es ese el objetivo principal de poner al corazón en el calendario; sensibilizar a las personas respecto a ese particular, ya que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en Chile, entre hombres mayores de 35 años y mujeres mayores de 50. Según el Ministerio de Salud chileno, las enfermedades cardiovasculares afectan por igual a hombres y mujeres, aunque la edad promedio en que afecta a los hombres es a los 55 años, mientras que a las mujeres es a los 65 años y al ser más tardía la edad que afecta a las mujeres, tienen el doble de riesgo de morir que un hombre en las mismas condiciones.
Las enfermedades cardio y cerebrovasculares, cobran la vida de más de 27 mil personas por año en nuestro país, el 25 por ciento de la población chilena tiene riesgo cardiovascular alto, y patologías como la hipertensión, la diabetes, el sedentarismo y la obesidad siguen siendo las enfermedades más prevalentes. En efecto, según Minsal y OMS, cada 20 minutos una persona fallece en el país por enfermedades del sistema circulatorio y el 28% de las muertes de Chile son causadas por las enfermedades cardiovasculares.
El objetivo más importante de esta campaña, renovada anualmente, es sensibilizar a la población de la importancia de los factores preventivos de las enfermedades cardiovasculares, ya que, por ejemplo, la obesidad en nuestro país está presente en más del 70% de las personas de más de 15 años y un 30% en los niños, representando un factor de riesgo muy grave para la aparición de enfermedades de este tipo. Los factores de riesgo son acumulativos, por lo tanto, es indispensable hacerse cargo desde la edad más temprana, de lo contrario niños pueden desarrollar enfermedades cardiovasculares muy precozmente.
Para prevenir las enfermedades cardiovasculares se deben controlar los factores de riesgo como la presión arterial elevada, el colesterol alto, el tabaquismo, la falta de actividad física. Junto con ello, es importante mantener una dieta saludable y realizarse el examen de medicina preventiva anual, el que es gratuito en el sistema público de salud. Está probado que el 80% de las muertes prematuras por estas enfermedades cardiovasculares, podrían evitarse cambiando nuestros hábitos de alimentación por una dieta más saludable, consumir frutas y verduras, disminuir las grasas saturadas, sodio y abandonar hábitos como el alcohol y el cigarrillo y realizar actividad física constante.
No hay alternativa, para cada uno de nosotros este cuidado es de nuestra responsabilidad, desde temprano, es el primer significado de ponerse la mano en el corazón.