Editorial

Los chilenos y su felicidad cercana

Los chilenos pasamos con notas destacables un prueba de apreciación general de lo que sucede, en efecto, una encuesta confiable muestra que han aumentado los chilenos que se declaran felices y satisfechos con su vida personal y familiar.

Por: Editorial Diario Concepción 19 de Diciembre 2018
Fotografía: Isidoro Valenzuela M.

La cercanía de la Navidad produce cambios en la conducta de las personas, en proporciones variables, los cambios pueden ser de diferente naturaleza, algunos atingentes a las practicalidades de la fecha, pero también a muchos otros asuntos más bien inmateriales o intangibles, por convicción personal del valor de los sentimientos o por una indefinible memoria colectiva de cierre de ciclo en una fecha que marca las día finales del año que está terminando de transcurrir.

A pesar de las cotidianas señales de insatisfacción, alarma, preocupación ante un despliegue incesante de noticias que pudieran ser harto mejores, los chilenos pasamos con notas destacables un prueba de apreciación general de lo que sucede, en efecto, una encuesta confiable muestra que han aumentado los chilenos que se declaran felices y satisfechos con su vida personal y familiar.

Las cifras que soportan esta apreciación son bastante elocuentes; casi ocho de cada 10 chilenos declara sentirse muy o bastante feliz, según los resultados de la encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP). Esta proporción de connacionales satisfechos, que corresponde a un 79%, levanta en ocho puntos porcentuales la vara como había quedado puesta, según el mismo sondeo efectuado hace diez años, 71% y en 20 puntos en comparación al resultado de 59% obtenido en 1998.

Hay, sin embargo, un matiz ciertamente contrastante; a esta percepción optimista de la situación de cada persona corresponde una evaluación en sentido inverso de la imagen que los consultados creen que tiene el resto de la población respecto de sus vidas. Mientras, el 73% le pone nota entre 7 y 10 a su nivel de satisfacción con su vida; sólo 24% cree que los demás chilenos tienen ese nivel de felicidad.

Para los sociólogos que examinan los resultados de esta encuesta, es evidente el cambio que ha experimentado la sociedad chilena, en el sentido de concentrar sus esfuerzos en el entorno próximo, con variables conocidas, buscar soluciones por sus propios medios, más que confiar en las tareas grupales en ámbitos más amplios o lejanos, que exhiben situaciones que desconoce y sobre las cuales no tiene control. Una expresión de individualismo, donde la vida de la persona está separada de la sociedad, en términos más generales, se observa una preocupación cada vez menor de las personas sobre el todo, como los vecinos, el barrio, la comuna o el mismo acontecer del país.

Para otros analistas, un factor que tiene mucho impacto en esta situación es el prevalente tono del debate público al que se expone la ciudadanía, tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales, en los cuales los mensajes con más frecuencia describen lo que no parece funcionar adecuadamente, los conflictos, las protestas, las malas prácticas institucionales, conjunto que genera una perspectiva pesimista de la sociedad.

La avaluación de los chilenos sobre su propia realidad, su entorno familiar y laboral inmediato tiene otro resultado, es ahí donde radican las bases de su optimismo en el futuro, son los círculos próximos lugares de refugio frente a una sociedad que se aprecia como conflictiva, tanto nacional como internacionalmente.

El desafío evidente está en aprender a valorar a los demás, cada quien con sus aportes al bien común, un sentimiento que puede crecer en la medida que la democracia vaya madurando después de un largo período de receso.

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