Economía y Negocios

Gastón Saavedra: “En el país el 42,2% del empleo actual está amenazado con desaparecer producto de la automatización”

La autoridad puso como ejemplo el riesgo que corren las cajeras de supermercados, donde varias cadenas ya utilizan el autopago.

Por: Edgardo Mora 23 de Julio 2019
Fotografía: Isidoro Valenzuela M.

Gastón Saavedra, diputado por el distrito 20 y hasta hace poco presidente de la Comisión del Trabajo de la Cámara Baja, presenta la otra cara de la Modernización Laboral propuesta por el gobierno. El contexto de fondo es complejo:  temores sobre la automatización,  dudas sobre la flexibilización laboral, la precarización del empleo, la inserción de los jóvenes y los adultos mayores que trabajan después de la jubilación. Ante estas realidades, el parlamentario expuso sus posturas y realizó un  análisis exhaustivo sobre estos.

– ¿El subsecretario dijo que para hacer frente a la automatización había que capacitar y reconvertir?

– Lo que pasa es que no solo se debe legislar para regular la legislación laboral, también tenemos que preocuparnos de los efectos y los impactos en la sociedad que está provocando esta revolución 4.0. Los informes que hay de la Universidad Católica y otras universidades locales indican que en el país 42,2% del empleo actual está amenazado con desaparecer producto de la automatización y un 17% está más urgentemente destinado a desaparecer. Hablamos de que 1.300.000 chilenos tendrán dificultades. Además, cuando se inaugure la nueva mina subterránea de Chuquicamata, significará que 1.700 de sus trabajadores tendrán que dejar sus empleos producto de la automatización.

 ¿El subsecretario Arab planteó también que uno de los objetivos de la modernización es flexibilizar la rigidez?

– Esa es su visión. Una cosa es la flexibilización y decimos también que va incluida la precarización del empleo. Lo que pasa es que tenemos que darnos cuenta que el futuro llegó y que por lo tanto en la legislación, es incluso hasta extemporáneo hablar de flexibilización. El punto es que hoy día tenemos otro tipo de empleo. De hecho, la huelga de Walmart es la huelga del futuro y eso porque hay 500 cajeras que tendrán que dejar sus empleos producto de la incorporación de la automatización en la gestión de ventas de los locales comerciales, por lo tanto, reitero, el empleo ya está afectado.

– ¿Cómo se espera afecte la modernización laboral al empleo?

–  El empleo ya está afectado, sin el efecto de la ley. Hoy día en Bío Bío tenemos un 7,2% de desempleo que está por sobre la media nacional que es 7,1% que ya es alto en país. Entonces no es la legislación lo que está provocando esto, sino que hay una situación compleja que hoy vive la economía del país que no es capaz de generar más empleos.

– ¿Pero existe algún estudio analizado por la comisión acerca del impacto de la modernización sobre el empleo?

– Obviamente, siempre se miden las cosas. Por ejemplo, en cuanto a los jóvenes, habían 17 mil estudiantes trabajando sin contrato donde el impacto es absolutamente positivo.

– ¿Cuáles son las principales diferencias respecto de la propuesta del Gobierno?

– Son dos visiones distintas. Una es la que nosotros creemos, entendiendo que hay cambios vertiginosos y que estamos en plena revolución 4.0, siempre hay que ir adecuándose desde el punto de vista de los derechos de las trabajadoras y trabajadores de forma que la relación empresa trabajador esté regulada por los intereses de ambas partes sin superponer uno sobre el otro.

– ¿Qué soluciones se prevén para la automatización?

– Hacer un gran pacto social por el empleo del futuro que se replique a nivel regional y local además de ver la forma de cómo cualificar la mano de obra para el desafío de los empleos del futuro.

– La modernización postula  menos horas y días de trabajo a la semana para apoyar la familia, ¿qué le parece eso?

– También apuesto que exista más tiempo para estar con la familia, pero hay que analizar a lo menos 4 elementos. Hay que legislar respecto de las vacaciones reorganizando el calendario, porque 15 días creo son insuficientes, deberían haber por lo menos 20 días. Otro punto es la jornada de trabajo, porque no soy partidario de la jornada propuesta, porque la encuentro más bien un desorden. Prefiero que existan 40 horas semanales y 160 al mes. Tercero, concordar cuáles son los factores que contribuirán a mejorar la productividad y compartir también los frutos de la misma en las remuneraciones a nivel nacional.

– ¿Qué se plantea respecto de los mayores de 65 años que aún cuentan con buena salud y quieren trabajar o emprender?

– Hay que abrir la posibilidad como ocurre en los países desarrollados para que puedan desarrollar labores afines como guía turístico, anfitriones u otros. Ver qué nichos de trabajo requieren de mayor experiencia y buen trato. No soy partidario de correr los umbrales de la jubilación.

– ¿Qué se analiza hacer con los migrantes?

– Es  un punto que debe ser considerado, porque están llegando personas con una formación superior a la nuestra.

– ¿Otro planteamiento de la modernización es ajustar las jornadas laborales de las Pymes en acuerdo con sus trabajadores?

– Soy pro pequeña, mediana y microempresa, porque son ellas las proveedoras de gran cantidad del empleo que el país tiene, porque hay tipos de trabajos, como es el caso de algunas maestranzas que existen en Talcahuano que reciben pedidos del cobre en el norte que tienen periodos altos y otros bajos donde es posible hacer ajustes, pero bajo una ley general que regule y evite abusos.

– ¿Cuál es su visión sobre la mayor participación laboral de la mujer?

– Hay que superar las brechas de género donde a igual trabajo debe haber igual paga.

-¿Y la Inclusión Laboral?

– Lo primero es adecuar todos los recintos productivos y de servicios para la discapacidad. Lo segundo, es abrir las puertas para que las personas con discapacidad puedan tener acceso al trabajo y generar un reimpulso a la ley actual como parte de la modernización.

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