Sumado al aumento de la inversión, son factores que auguran altos montos por concepto de recaudación. Clave entonces será la eventual aprobación de la iniciativa que busca “modernizar” la actual reforma ya en régimen.
Altas expectativas existen entre el empresariado ante el proyecto de modernización tributaria presentado por el Gobierno, y hay cierto consenso en que va en la dirección correcta.
Aunque también se han alzado voces críticas desestimando el real alcance de la propuesta, tildándola incluso de “macroeconómicamente insignificante” por el actual decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, José de Gregorio, argumentando que las reformas tributarias de Aylwin y Bachelet representaban un 3% del PIB, mientras que la modernización tributaria solo 0,3%”.
Diario Concepción consultó al abogado y Socio Fundador de Moraga & CIA, Álvaro Moraga, su opinión sobre el diseño del proyecto de modernización y su eventual impacto en la inversión.
Éste coincidió en que el proyecto va en la dirección correcta; incluso, planteó, esperaba que fuera más profundo. “La reforma tributaria de la Presidenta Bachelet no solo subió los impuestos de las empresas del 20% al 27% (en momentos en que el Reino Unido la estaba llevando al 17%), sino que tenía un nivel de deficiencias tan graves, que costaron la salida de un Ministro de Hacienda y el impulso de una nueva ley para aclararla. Por lo tanto, lo que procede es deshacer, en la medida de lo posible, lo que llevó a Chile a una desaceleración histórica, con un crecimiento del 1.5% el 2017. Por lo tanto, ahora es dable esperar el efecto contrario, es decir, un aumento en la inversión y sobre todo en el crecimiento.
-¿Qué opina sobre los dichos de De Gregorio?
-En noviembre del 2010, también en un seminario, De Gregorio señaló: “La reforma tributaria tiene un montón de deficiencias, entre ellas la discriminación entre chilenos y extranjeros”, agregando que “subir la carga tributaria no es gratis”. Ahora señala que “el proyecto tiene problemas de diseño macro” y que no aumentará la inversión. El problema de la cátedra y la visión macro es que no es capaz de ver los efectos reales de las políticas públicas mal hechas en el empresario común. El alza de impuestos y la desintegración generaron paralización de la inversión, lo cual es un hecho incuestionable.
-¿Qué tan verídico es que el proyecto le quitaría atribuciones al SII y que repercusiones traería esto?
-Si bien literalmente el proyecto le quita atribuciones al SII, en el fondo lo que hace es reforzar, por la vía legal, aquellas consideraciones por las cuales el SII debe reconocer que no tiene esas atribuciones, muchas de las cuales se ha ido arrogando por la fuerza de los hechos en los últimos años. Un ejemplo es la posibilidad de fiscalizaciones eternas, sin plazos, y que no producen cosa juzgada. Así, por ejemplo, después de dos años de fiscalización, con libros y registros retenidos, problemas para el timbraje y un gran desgaste de todo tipo, puede suceder que la fiscalización termine sin observaciones para que al año siguiente pueda comenzar otra por los mismos temas ya revisados.
-¿Cuál cree será impacto real de la modernización en la economía?
-Este es un tema donde cada uno hace sus proyecciones sobre la base de sus propios análisis. Por ejemplo, en el mensaje del proyecto de la Presidenta Bachelet se dijo que la reforma recaudaría 8.300 millones de dólares. Y no fue cierto. Por el contrario, la falta de recaudación por la menor inversión derivó en que Chile pasara de una tasa de deuda del 14,9% del PIB al 25% en los 4 años anteriores.
Y aun así tampoco fue cierto que esto generaría educación gratuita y de calidad en forma universal. Ahora esta administración señala que la integración se compensará fundamentalmente por la mayor recaudación derivada de un mayor crecimiento (hasta el momento está resultando cierto) y por establecimiento de las boletas electrónicas, que aumentará la recaudación de IVA. Si se mantienen las tasas de crecimiento e inversión de los últimos 10 meses, al cabo de 4 años el impacto sería muy significativo.
-¿Cuáles son los desafíos pendientes en materia tributaria?
-El principal desafío es lograr aprobar este proyecto de ley con un consenso generalizado de su necesidad, sin ideologías de trinchera. Parte de ese consenso debería pasar por modificar los quórums de aprobación de la legislación tributaria, de mayoría simple a mayoría calificada, a fin de evitar que mayorías transitorias cambien permanentemente el sistema, ya que eso profundiza la falta de confianza en éste, lo cual aleja la inversión de largo plazo, que es clave para acercarnos al umbral de desarrollo.