El mandamás de la cartera, Mario Delannays Araya, está confiado en que las observaciones serán más de forma que de fondo para una rápida ejecución en las 10 comunas.
El Plan de Descontaminación del Gran Concepción fue ingresado a la Contraloría General de la República para su revisión a comienzos de año. El seremi de Medio Ambiente, Mario Delannays Araya, explicó que no se sabe aun cuando podría estar lista dicha evaluación y de si vendrá con observaciones de forma o de fondo. Lo que sí desea es que de tener algunos detalles, que sean menores para poder implementarlo rápido en las 10 comunas donde lo esperan hace ya una década, cuando comenzó a gestarse, pasando de gobierno en gobierno.
– ¿En qué está el Plan de Descontaminación del Gran Concepción?
– El de Concepción está en Contraloría aún. Fue ingresado de acuerdo al compromiso que adquirimos durante mayo de este año y estamos a la espera de las observaciones, que esperamos sean las menos posibles por parte del ente contralor. Eso significa que tenemos dos alternativas. Que si hay pocas, podemos implementarlo rápidamente. O, inclusive, en que hagamos modificaciones, quizás esto involucre una vuelta más larga desde el punto de vista administrativo.
– En el caso de que se alargue, ¿esto va a tomar más tiempo?
– Nosotros apostamos a que las observaciones sean más de forma que de fondo. Por eso fuimos bastante cautos en no provocar que el ente nos fuera a observar y dijera que es un plan nuevo, dado a que eso nos retrotrae a otras instancias administrativas anteriores. Si ese fuera el caso, que dudo que así sea, los énfasis tanto del programa de gobierno y las prioridades que hay en la Región tienen que ver con calidad de aire y eso significa el Plan de Descontaminación.
– ¿Hay fechas que se manejan por parte de Contraloría, de cuándo se devolvería con la revisión?
– Yo no estoy trabajando en Contraloría. No sé cuál es.
– Pero me imagino que debe tener un estimativo.
– Va a depender del tenor de las observaciones, del grueso, de los tiempos de ese servicio. Hay que entender que no es sólo el Plan de Descontaminación de Concepción que reingresó. Están los de otras regiones.
– Si se ejecuta y no tiene los efectos esperados, ¿se pensará en otra iniciativa más ruda?
– Es un decreto y tienen la facilidad, la plasticidad de poder modificarlos. Al tercer año está la revisión y al quinto año tú puedes modificarlo. Ahora el impulso, la importancia que le demos nosotros es una materia súper importante. Son 10 comunas.
– En Chillán, donde ya se aplicó, sienten que no se ha notado mucho.
– Tenemos el objetivo de reducir las emisiones de las fuentes industriales en un 30%. Vamos con 20.000 recambios. Si ponderas la cantidad de material particulado que se disminuye, creemos que los plazos se ajustan a las metas que nos colocan. La velocidad de esos cambios dependerá el éxito relativo del programa.
-Entonces, para todos aquellos que están pendientes de este proceso, ¿cuál sería el mensaje?
– Hoy estamos participando de dos instancias: la espera, ojalá, de poder recibir prontamente la evaluación que hace la Contraloría. Estamos a la expectativa y, en paralelo, está la difusión, porque esto involucra a 10 comunas y créame que estamos atento a esto, que la gente lo entienda como algo útil, urgente, necesario e importante. Hay que ir alineando las expectativas. Decir que este será muy relevante, porque no sólo apunta a la parte atmosférica, también se debe acoplar con transporte, salud u otras iniciativas como la restricción vehicular, la segregación de vías y ciclovías.