La autoridad regional analizó cifras de los últimos 10 años, explicando que el gran desafío es alcanzar el progreso absoluto.
En la última década, el empleo, los sueldos, la inversión, entre otros, se han optimizado. Sin embargo, aún no alcanzamos los niveles de un país completamente desarrollado. El seremi de Economía Bío Bío, Mauricio Gutiérrez, aseguró que se trabaja para que los jóvenes vean la meta cumplida.
– En los últimos 10 años, y más atrás, en el Servicio de Evaluación Ambiental Regional se han aprobado US$ 22.000 millones. ¿Hay un desafío para seguir creciendo en este Gobierno? ¿Qué le parece en esta materia los anteriores gobiernos?
– Han ido aumentando. Eso es positivo, pero el SEA cumple con una normativa que está vigente y que se ha ido actualizando. No obstante, nos ha ido provocando que dentro de la Ocde estemos en los últimos lugares del ranking, por ser demasiado burocráticos y lentos en los trámites y no es precisamente por el SEA que se provoca esto, sino que se da en cada uno de los servicios sectoriales que participan en las evaluaciones los que se demoran demasiado. Por ejemplo, si un proyecto no es amigable con el medio ambiente y su beneficio va a ser menor que su costo, la idea es decirle que no inmediatamente. Es mejor un no inmediato y preferir un sí para siempre, por ende, la cantidad de monto, si bien, ha sido creciente en los últimos 10 años, las cifras nos están diciendo en este último periodo – en el gobierno anterior- ha sido decreciente, por lo tanto, para poder retomar la senda de crecimiento donde nos estaba yendo bien en términos de inversión. Tenemos la obligación como Gobierno que de aquí a 4 años más, volver a las tasas del 25%. Para eso vamos a tener que trabajar mucho y vamos a tener en los próximos tres años tasas de crecimiento de la inversión del orden del 7% anual. Así que hay un gran desafío. Si bien, el análisis histórico es bueno, en el período del gobierno pasado no fue bueno en el nivel de inversiones. En consecuencia, hay un desafío que heredamos como Gobierno y lo hacemos felices porque estos están para cumplirlos.
– En lo que se refiere al producto Interno Bruto PIB, la Región ha tenido altos y bajos. ¿Qué le parece este comportamiento? Se habla de un shock de inversión, ¿Podría el Bío Bío tener un PIB superior al 3% en estos próximos cuatro años?
– Nosotros como Región, el mayor peso que tenemos en las exportaciones y en nuestro PIB es en la actividad forestal que es una altamente “comoditizada” a nivel mundial. Por tanto, somos sujetos de los vaivenes de la economía mundial y de los ciclos de los commodities. Por esa razón, pareciera que es un lugar común hablar del valor agregado. Como Región tenemos todas las capacidades para tener un desarrollo tecnológico mayor y darle mayor valor agregado. Tenemos 19 universidades, cerca de 12 institutos. Es así como la capacidad para formar capital humano, la tenemos. Debemos tener el valor, disposición y temple para invertir recursos. Las empresas deben invertir en recursos para investigación y desarrollo. Nosotros apreciamos en la Seremi de Economía que las Pymes son bastante más flexibles e intentan mucho hacer inversión en investigación y innovación para diferenciarse, y esto les permite tener un costo de venta mayor lo que significa utilidad mayor, ya que a mayor nivel tecnológico los márgenes debiesen ser mayores. Ese es desafío de las regiones y de este Gobierno.
– El desempleo es un gran tema de interés ciudadano. Sin duda que la gran meta será seguir bajando estos indicadores ¿Cómo se logrará?
– Históricamente hemos estado en los últimos lugares de la tabla. Fue una buena noticia el trimestre pasado cuando tuvimos las cifras que entregó el INE, cuando marcamos una tasa regional de desempleo del orden del 6.7% ( hoy eso sí de 7,2%), que nos sitúa dentro de la media nacional. Es una cifra saludable y que no llama a desesperarse en el desempleo. Pero una cosa es tener empleo y otra es empleo precario. Aquí en la Región tenemos casi 300.000 personas empleadas por cuenta propia y ellas nos preocupan mucho, porque son prácticamente desempleadas. Con mucho esfuerzo hoy se levantan para tener alguna actividad. No hay que olvidar que la encuesta del INE pregunta: ¿la semana pasada alguien trabajó algunas horas como un Uber o, incluso, a un comercio ambulante? Lo que nos debe preocupar no es la tasa, que no es mala, pero si saber qué es lo que agrega o no agrega. Por consiguiente, debemos preocuparnos de esas 300.000 mil personas. Ese es el desafío del Presidente Piñera, aumentar la inversión y los emprendimientos para que esas personas pasen a tener un trabajo que les permita pagar sus imposiciones y cobertura de salud a lo menos.
– Los ingresos de los habitantes de la Región también han experimentado cambios (sueldo imponible sobre los $ 600.000). No obstante, el endeudamiento crece igualmente.
– Le puedo decir como antecedente que 1.000 millones de personas viven en un país desarrollado, lo que es bastante bueno para ellos. Nosotros como país tenemos un ingreso per capita del orden de los US$ 25 mil , lo que significa que estamos bastante lejos de tener un ingreso de país desarrollado, pero vamos camino a. Por esta razón, lo deseable es seguir avanzando. Creo personalmente, y me hago responsable, que los cuatro años pasados fueron un retroceso en el camino que habíamos diseñado en el primer gobierno para ir avanzando hacia la meta final de ser un país desarrollado. Claramente, el ingreso per capita es un promedio. Existe una alegoría que dice que cuando dos personas compran un pollo y el pollo me lo como yo, el consumo promedio es medio pollo por persona. Básicamente ese análisis es simplista explica el ingreso per capita de US$ 25.000 que no llega a ser el promedio de todos. Por eso que es necesario seguir repitiendo que necesitamos aumentar el nivel de inversión en Chile y generar empleos de buena calidad. Hay una regulación laboral que permite que no haya abuso del trabajador y tenga su justa remuneración. Nos queda camino por recorrer, pero creo que estos cuatro años van a ser para recuperar lo que perdimos tiempo atrás y prepararnos para lo que viene. Esperemos que más delante los más jóvenes puedan disfrutar de un país y una Región desarrollada y eso tiene que ver con el nivel de ingreso que cada persona tiene.