La Superintendencia de Salud reveló los resultados financieros de 2017, donde se observa un alza del 40,6% en las ganancias de las isapres durante el año pasado, cifra que alcanza los $70.577 millones.
Las cifras, que representan las utilidades más altas desde 2012, no consideran a la desaparecida Masvida, cuyas pérdidas suman $37.498 millones. En cambio, incorpora a Nueva Masvida, por lo que las ganancias fluctúan entre los $3.269 millones de Cruz Blanca y los $21.987 de Banmédica, consignó La Tercera.
Los números positivos se explican principalmente por una mayor recaudación asociada a la prima GES, que subió 38,9% en el sistema, lo que se tradujo en ganancias anuales de entre $30 mil y $50 mil para cada beneficiario.
“Si bien las utilidades de 2016 incorporaron parte de la recaudación por prima GES, en 2017 el reajuste tuvo plena vigencia y eso hizo crecer en forma significativa las utilidades”, indicó el ex superintendente de Salud y académico de la U. Andrés Bello, Manuel Inostroza.
A lo ya mencionado, se suma una desaceleración en el gasto por atenciones de salud y licencias médicas, dado el crecimiento del costo de estas prestaciones en un 5,6% y un 5,3, respectivamente, comparado con 2016.
“El año pasado fue más bajo en términos de crecimiento económico y eso repercutió en la industria prestadora. De hecho, al revisar los balances de las clínicas, todas disminuyeron los ingresos, hubo menor actividad asistencial, y eso generó menor gasto en prestaciones en las isapres”, comentó Inostroza.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Isapres, Rafael Caviedes, coincidió con los comentarios expuestos: “Fue un año benigno en términos de enfermedades y en la demanda asistencial. A eso se suma que cuando la economía está más débil, la gente hace menos uso de las prestaciones. Las personas se postergan, porque no es solo el gasto en la consulta, sino exámenes y medicamentos”.
Desde la Comisión de Salud del Senado indicaron que las utilidades alcanzadas por las isapres les permite tener un espalda financiera que no justifica las alzas a los precios anuales de los planes.
Bajo este marco, insistieron en que el Gobierno impulse una reforma que impediría los reajustes unilaterales, además de regular inequidades del sistema.
“Esto tiene que ser abordado, ya no resiste más. Tenemos utilidades multimillonarias por un lado y, por otro, planes que se suben sin regulación. No podemos seguir dilatándolo”, afirmó la senadora DC Carolina Goic.
El senador RN, Francisco Chahuán, se sumó y sostuvo que “pedimos al gobierno que ponga suma urgencia al proyecto que está en segundo trámite para terminar con los problemas del sistema”.