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Entregan claves para proteger salud mental tras los incendios

Desde el 13 de febrero, 29 personas han sido asistidas por unidad móvil en Penco. Ya se definió aplicar metodología de primeros auxilios psicológicos en comunas afectadas.

Por: Ximena Valenzuela 15 de Febrero 2019
Fotografía: Archivo | Diario Concepción

El estrés postraumático, que sufren algunas personas afectadas por los incendios forestales, puede manifestarse con dolor de cabeza y taquicardia y crisis de pánico.

De ahí la importancia del trabajo que está realizando la Mesa de Salud Mental de Emergencias y Desastres, liderada por la autoridad sanitaria e integrada por múltiples organismos, buscando entregar atención a las víctimas.

El seremi de Salud, Héctor Muñoz, explicó que la mesa permite desarrollar estrategias conjuntas en materia de salud mental para seguir enfrentando la emergencia, que de por sí genera un estrés importante en la población. Por ello, un equipo de salud mental del Servicio Salud Concepción, está desplegado en terreno, en Penco, con una unidad móvil del Servicio de Salud Talcahuano, que desde el 13 de febrero ha atendido a 29 personas.

Se definió, además, que en las comunas afectadas por incendios se aplicará una metodología de primeros auxilios psicológicos.

Cómo cuidar la salud mental

Ante catástrofes como los incendios forestales, lo usual, según explicaron desde la Seremi de Salud, es que los adultos presenten estado de nerviosismo, angustia y tiendan a culpar a los demás de lo ocurrido, muestren signos de tristeza, impotencia, insomnio, irritabilidad, disminución de la capacidad de trabajo y crisis de pánico, entre otros.

Ante ello, se recomienda buscar compañía, realizar acciones que lo hagan sentirse útil, compartir sus sentimientos, escuchar a otros que han vivido la misma situación. Además, alimentarse e hidratarse, descansar y evitar exposición a noticias relacionadas con las emergencias.

“Cuando las manifestaciones son muy intensas o se prolongan en el tiempo es importante recurrir a los recintos de salud por ayuda, ya que dichas reacciones pueden afectar la cotidianidad y la convivencia con los demás”, agregó Muñoz.

A los niños, se les debe acoger y dar seguridad, ya que pueden manifestar conductas de miedo, irritabilidad y alteración del sueño. Se les debe ayudar a recuperar su rutina de juegos y facilitar la expresión de lo vivido.

“Se pueden evitar daños a la salud mental con simples medidas como hacer una pausa y caminar 15 minutos; beber abundante líquido, evitando el exceso de cafeína y alcohol; conocer los límites individuales (…); no dudar en pedir ayuda o consejo; y tratar de equilibrar las demandas del trabajo en la emergencia y las necesidades propias y de la familia”, señaló la encargada de Salud Mental de la Seremi, Andrea Salgado.

“En caso de habilitarse albergues, lo importante es proteger y no descuidar a niños, personas mayores y en situación de discapacidad; participar en la organización del albergue; buscar compañía para compartir experiencias y hablar; apoyar en las tareas de recuperación, organizar y participar de actividades recreativas; no evadir el dolor o sufrimiento con drogas, alcohol o automedicación”, agregó Salgado.

Claudio Guerrero Bolívar, integrante de la Mesa y coordinador nacional de la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastres de la Fundación Tierra Esperanza, dijo que muchas veces, en una fecha posterior a la emergencia, pueden generarse problemas en el sueño, alimentación o sobre reacción a una noticia. “Para estos casos, se encuentran disponibles equipos de salud y especializados para aportar en orientar a la población y reducir miedo o incertidumbre. Uno entrega herramientas a la población para que estos hechos no pasen de largo”.

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