La directora regional del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Carolina Chang, confirmó ayer que estudian la interposición de dos acciones legales por el caso de la niña de 13 años herida con perdigones presuntamente disparados por Carabineros, tras una marcha realizada en protesta por la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca, realizada la tarde del miércoles.
La abogada precisó que una sería por las lesiones leves que tiene la adolescente, debido al impacto de las municiones, que serían de goma, y otra por vejaciones injustas, ya que aseguró que ella y las jóvenes que la acompañaron cuando fue a constatar lesiones al hospital regional fueron maltratadas por un efectivo de Carabineros, quien forcejeó con ellas para arrebatarles el parte médico, donde estaba el diagnóstico de la niña, “y hay maltrato de palabras, por lo que llegaron otros dos funcionarios, que calmaron al primero”.
Por esto, agregó que ya estudian las acciones legales, las que serían presentadas la próxima semana.
El prefecto (s) de Concepción, el comandante John Cornejo, precisó que Carabineros se autodenunció por este hecho ante la Fiscalía y, además, inició una investigación para determinar qué ocurrió en este caso.
Agregó que la marcha no estaba autorizada, en la que hubo 11 detenidos y que el oficial a cargo de Fuerzas Especiales hizo uso del arma, ya que debieron repeler un ataque realizado con bombas molotov. Explicó que la escopeta antidisturbios se utiliza en este tipo de situaciones, pero que sólo utiliza municiones de goma. “Por eso, se va a realizar esta investigación, para saber qué fue lo que ocurrió”.