El Tercer Juzgado de Garantía de Santiago modificó la cautelar en contra del economista, puesto que ya no presenta un peligro de fuga.
Dicen que la tercera es la vencida, y así lo fue para el “economista” penquista, Rafael Eduardo Garay Pita. Puesto que en su tercer intento por obtener su libertad, la justicia le concedió la modificación de su medida cautelar.
Mediodía en Chile continental y las puertas del Anexo Cárcel Capitán Yáber de Santiago se abren, tras 13 meses sin ver el sol, Garay abandonó la prisión preventiva. Al salir desde el centro penitenciario, Garay era esperado por los medios de comunicación que han seguido la causa, transeúntes, quienes insultaron al dueño de “Think & Co.” y por su abogado defensor, Daniel Celis.
El imputado salió desde el penal con una bolsa de basura que contenía todas las pertenencias con las que llegó desde Rumania y se trasladó hasta un departamento, ubicado en el piso 10 de calle Lord Cochrane 635, en pleno centro de Santiago, donde cumplirá este nuevo régimen cautelar.
Durante la audiencia, el defensor del penquista argumentó que no existe peligro para la sociedad, además que ha reparado con celo el mal causado.
Puesto que a los dos depósitos por $500 mil cada uno, se sumó otro por $6 millones durante la semana pasada. A esto se sumó un “arraigo social”, puesto que Garay vivirá con su ex pareja, con quien tiene una hija, además de que un empresario le ofreció empleo. Argumentos suficientes para que la magistrada Verónica Encina cambiara la medida cautelar.
Además de cumplir arresto domiciliario total, Rafael Garay deberá someterse a una terapia psiquiátrica, para tratar su alcoholismo, a lo que se suma su terapia por depresión.
El fiscal José Morales indicó que “su irreprochable conducta anterior, la colaboración que ha mantenido en opinión del tribunal y la reparación con celo del mal causado, cuestión que el Ministerio Público no está de acuerdo”. Para el persecutor, el peligro de fuga por parte del penquista se mantiene latente, y adelantó que junto a los querellantes apelarán al dictamen.
Recordemos que Rafael Garay fue detenido el 18 de noviembre del año pasado, en la localidad rumana de Brasov, tras permanecer dos meses fugado. Mientras que a nuestro país llegó el 16 de marzo de este año, tras un proceso de extradición liderado por el Estado chileno.
Garay se encuentra formalizado por el delito de estafa en contra de 36 personas por un monto que asciende a $1.748 millones, que habría producido mediante su empresa “Think & Co”.