Considero pertinente aportar lo siguiente, respecto a la publicación del domingo 7 de enero de 2018 en Diario Concepción, donde el Sr. Luis Atabales destaca las cifras azules y la estabilización de la cartera de afiliados de Isapre Nueva Masvida, a menos de 10 meses de asumir como gerente general luego del cambio de propiedad de la empresa:
Los buenos resultados y la estabilización que se están viendo hoy son en gran medida producto de los planes de salud diseñados y comercializados por la ex Isapre Masvida. Los nuevos planes y convenios surtirán efecto recién a mediados de 2018.
Queda demostrada la cuota de confianza depositada por la mayoría de los afiliados que permanecen aún vigentes, por lo que para ellos representa la marca Masvida, un capital de marca que Nexus inteligentemente ha decidido mantener.
Consta que más del 70% de los afiliados de la ex Isapre Masvida se declaraba satisfecho o muy satisfecho con sus beneficios y el servicio recibido poco antes de la crisis financiera en la que se vio envuelta. Ese fue el “colchón” con el que se logró soportar la estrepitosa caída.
Recordemos que Masvida logró liderar en crecimiento y permanecer por años en un sitial de admiración y respecto dentro de su categoría o industria siendo recordada como una Isapre diferente que no reajustaba el precio de sus planes.
En conclusión: El derrumbe sufrido por la ex Isapre Masvida no ocurrió por una mala operación de la Isapre propiamente tal, sino por un desafortunado y aun poco claro manejo financiero de quienes estaban a cargo de las finanzas a nivel del holding de empresas.
En lo personal, fui desvinculado en marzo de 2017 justo antes del cambio de propiedad de la empresa, pero me queda la satisfacción de haber aportado con una entrega comprometida y honesta, aportando por más de 24 años a la construcción de una marca que sigue vigente, dando frutos para beneficio de casi medio millón de chilenos.
