En Talcahuano y Concepción fue necesaria la intervención de Fuerzas Especiales para lograr disipar a los manifestantes.
Los artesanales quieren que la nueva ley que regula la captura se ejecute, ya que en ella se estipula que sólo ellos podrán trabajarla, mientras que los industriales estiman que dejarlos afuera conllevará a despidos masivos.
Manifestantes exigen que el Gobierno envíe al Tribunal Constitucional proyecto de la Jibia y que retire el de Ley Corta.