Tras la emergencia sanitaria y las restricciones de movilidad, el país regresa a la “normalidad” prepandemia y con ello la posibilidad de renovar los compromisos para contribuir al desarrollo de la Región. El territorio necesita de un renovado empujón para abordar tareas pendientes y lanzar nuevos desafíos.
Distintos dirigentes políticos coincidieron en la falta de menciones explícitas para la Región del Biobío, particularmente en materia de infraestructura.
De los más de \$5.000 millones asignados por el Ministerio de Educación a la Región, \$2.700 millones fueron para establecimientos de siete comunas del Gran Concepción. Mientras que otros \$2.369.362.336 se repartieron entre las otras dos provincias.
La idea es realizar transferencias tecnológicas, fortalecer a estudiantes del área logística y su inserción laboral, entre otros. En la actividad también se abordaron temas de infraestructura, normas y seguridad.
Por de pronto, hay que asumir que esta debe constituirse en un aporte para progresar sostenidamente en el proceso de descarbonización y no en un factor adicional de emisiones.