Ingesta anual per cápita del alimento son 700 gramos, 300 más que en 2018, y la proyección es seguir creciendo. Favorable para la apicultura y la salud de consumidores que se beneficiarán de sus aportes, que es lo que se busca promover con el Día Nacional de este producto natural cada 6 de agosto.
Si hay quien desee comidas contundentes y fácil se antoje con fritos calzones rotos o sopaipillas puede justificarse en una respuesta evolutiva-orgánica, pero tener autorregulación para prevenir riesgos.
De distintos reinos, colores y tamaños, de ínfimas a gigantes que forman bosques, cientos habitan Chile, todas tienen un rol ecológico vital y muchas están amenazadas.
Alternativa se ha planteado ante la gran alza de un producto que proviene de distintas fuentes vegetales, aporta ácidos grasos esenciales y beneficiosos, pero que se transforman en nocivos preparaciones sometidas a calor como las frituras, parte del patrimonio gastronómico y que le vuelven un problema a evitar.
Es sabor básico, da sazón, mejora textura y conservación de alimentos, y es nutriente esencial, pero eso la ha llevado a ingerirse a niveles tan altos que sus impactos son un problema de salud pública global. Su inclusión mesurada se busca promover durante marzo con una semana mundial para la sensibilización, que se celebra estos días.
Hay distintos tipos, todas se caracterizan por no incluir carne y ser protagonizadas por productos vegetales, lo que hace que este tipo de alimentación sea sana y reporte muchos beneficios para las personas y también el planeta que se promueven en el Día Internacional del Vegetarianismo cada 1 de octubre.