
El Río Biobío y sus vecinos sin duda deben tener un espacio privilegiado de la ciudad. Esto considerando las ventajas a futuro, entre otras, desde el punto de vista turístico.
También, por cierto, que, más allá de colores políticos, la actividad ha logrado obtener recursos regionales de diversos gobiernos para su ejecución y se ha mantenido gracias a ello.
Hay evidencia de descongestión vehicular y de eficiencia en el traslado, así como beneficios para la salud al ejecutar actividad física. Bien por la antigua bicicleta.
Tenemos varios desafíos, como potenciar con mayor fuerza nuestras costas, la zona de Arauco y los paisajes que hay en nuestra precordillera, en la provincia de Biobío.