Andrea Moraga Paredes
Ingeniero Químico Universidad de Concepción
Gerente Unidad Hidrógeno y Sostenibilidad
Instituto de Investigaciones Tecnológicas IITUDEC
El 8 de octubre de cada año se celebra el Día Mundial del Hidrógeno y las Celdas de Combustible, una oportunidad para destacar el rol que tiene y tendrá el Hidrógeno en la transición hacia un futuro sostenible.
El hidrógeno verde (H2V) se produce mediante electrólisis del agua utilizando energía renovable, como solar o eólica, y sólo libera oxígeno. En el contexto de la crisis climática, el H2V puede desempeñar un rol fundamental en la transición hacia una economía baja en carbono.
En la Unidad de Hidrógeno y Sostenibilidad del IIT de la Universidad de Concepción, estamos plenamente comprometidos con este objetivo, trabajando en impulsar y fortalecer el ecosistema de innovación colaborativo; involucrando sector privado, público, academia y sociedad civil; para desplegar el potencial del hidrógeno renovable en la Región del Biobío y nuestra macro región centro- sur de Chile a través de la producción y usos de H2V, con énfasis en aplicaciones locales, e identificando oportunidades para su uso en el sector productivo con el fin de descarbonizar nuestra matriz industrial. La unidad promueve el trabajo conjunto de esta cuadrúpedo hélice, en cuanto al desarrollo tecnológico y la innovación, incluyendo; identificación y evaluación de proyectos, pruebas de concepto, prototipos y pilotos con potencial demostrativo, tanto del hidrógeno como de sus derivados.
La Región del Biobío tiene condiciones privilegiadas para el desarrollo del mercado del H2V, con la oportunidad de convertirse en un polo de producción y uso, dado que cuenta con múltiples puertos industriales que mueven la carga forestal, pesquera e industrial, así como con actividades de refinación de petróleo, industria siderúrgica, industria química, cementera, celulosa y papel, entre otras. Como también polos industriales en Talcahuano y Coronel, donde se puede encontrar demanda local agregada, atractiva para inversiones.
Estas condiciones permitirían posicionar a la Región como un centro productivo y tecnológico de H2V, que genere combustibles e insumos limpios, soluciones de bajas emisiones para la industria, desarrollo de nuevos productos y servicios de alto nivel tecnológico, así como la posibilidad de crear nuevos emprendimientos de base tecnológica, encadenamientos productivos y capital humano altamente calificado.