Necesitamos derribar mitos y estereotipos para disminuir las brechas de género y lograr la igualdad.
MARÍA CLAUDIA ORMAZÁBAL ABUSLEME
Directora del Programa de Género y Equidad UTEM
Entre las varias conmemoraciones internacionales que Naciones Unidas promueve con la idea de sensibilizar sobre diferentes temáticas de interés público, destaca la que recuerda a las niñas y jóvenes en las TIC. ¿Cuál es la idea en este caso específico?
Las TIC son parte de nuestra vida y difícilmente habrá un retro- ceso al respecto, pues constituyen un recurso indispensable para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Sin embargo, su uso presenta desigualdades, siendo la brecha de género una de ellas.
Según datos del ministerio de Educación de nuestro país, el ingreso de mujeres en 2024 a carreras de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, por su sigla en inglés) fue de 30,2% mejorando significativamente respecto de años anteriores.
Si bien estos datos son alentadores, necesitamos derribar mitos y estereotipos en todos los niveles educativos y fundamentalmente en la etapa escolar. Sin duda, los sesgos de género afloran al momento de vincular un área de conocimiento, una disciplina del saber o una profesión con el sexo de las personas, como si esto fuese una relación indisoluble o respondiera a las preferencias propias de tal o cual género.
Lo importante de conmemorar estas fechas es que permitan reflexionar respecto a cómo mejorar los actuales indicadores en materia de equidad de género, de manera que la participación femenina en los distintos ámbitos de la sociedad no continúe siendo una excepción. Necesitamos derribar mitos y estereotipos para disminuir las brechas de género y lograr la igual- dad. Y, claro, ante eso queda mu- cho camino por recorrer.