Horacio Lara Marchant nació en Concepción el 24 de enero de 1860. Su padre fue el periodista Manuel Jesús Lara y su madre Apolinaria Marchant.
Recibió su educación en el Liceo de Concepción. Se inició muy joven en el mundo de las letras y el periodismo. A los 15 años publicó sus primeros ensayos en “La Revista del Sur”, diario fundado por su padre en 1864 que alcanzó gran circulación en la época.
En 1876 ocupó la presidencia de la Academia Literaria “El Porvenir”. A la muerte de su padre en 1881, asumió la redacción en jefe de “La Revista del Sur”.
Un año más tarde fue designado regidor municipal. Su vinculación a la Sociedad de Instrucción Primaria y a la Sociedad Francisco Bilbao, amplió su actividad comunitaria en Concepción. Publicó en esos años obras como “La Revolución Moral”, “Voltaire”, “El Maestro Ciruela”, así como su estudio histórico “Concepción en 1810 y 1812”, el que obtuvo el primer premio en un certamen literario realizado por la Municipalidad de Concepción en 1887.
En sus textos destacaba su estilo argumental, imparcialidad y su fuerte convicción liberal. Uno de sus artículos más reconocidos fue el titulado “La Prensa en el Banco de los Acusados”, de 1886, en el cual hace una defensa de la libertad de expresión en el periodismo.
Al ser nombrado Secretario de la Intendencia del Ejército de La Araucanía, tuvo que fijar residencia en Angol. Allí colaboró con el diario “El Colono” publicando ensayos como “Relación Cronológica de los Historiadores Generales de Chile”, “El Origen del Idioma Araucano”, “Los Terremotos de Chile” y “Crónica de La Araucanía”, la que sería su obra principal.
En 1890 volvió a Concepción y fundó el diario “El Correo del Sur”. Durante la Revolución de 1891, tomó una tendencia Balmacedista, defendiendo al presidente y a su administración. Derrocado el presidente, la imprenta y su diario fueron asaltados y destruidos. Fue perseguido, su casa sufrió saqueos y se le mantuvo encarcelado sin derecho a defensa durante dos años, hasta que la Corte Suprema lo liberó, acogiendo una petición de los Caciques de La Araucanía, quienes además, le ofrecían sus tierras como patria por considerarlo “el cantor de sus glorias en la historia de su nación”.
Una vez libre, Horacio Lara se trasladó a la capital, donde retomó su trabajo periodístico escribiendo para el diario “la Democracia” y realizando colaboraciones para “La Discusión” de Chillán y el periódico “El Mariluán” de Victoria.
El 1895 Lara realizó una selección de los artículos costumbristas de Pedro Ruiz Aldea, a quien llamaban el “Jotabeche del Sur”, colección llamada “Tipos y Costumbres Chilenas”, que se transformó en uno de los clásicos de la literatura costumbrista nacional.
Horacio Lara Marchant, fue un penquista que a través de su pluma dio a conocer parte importante de nuestra historia. Falleció en 1897.
Alejandro Mihovilovich Gratz
Profesor de Historia y Geografía
Investigador Histórico.