Opinión

Las cosas claras y el chocolate espeso

Por: En el Tintero 18 de Julio 2019

Hay oportunidades que nos pueden venir algo así como ataques de arrepentimiento, etapas frágiles, en las cuales nuestras defensas contra la autocrítica se encuentran disminuidas y nos parece que hemos hecho todo mal o, por lo menos, gran parte; como el exceso de crítica, a políticos, a instituciones, a los vendedores de planes telefónicos, que hemos sido demasiado intolerantes.

Sucede al mirar Concepción, un poco desde arriba, sin sentimiento de superioridad, sino desde puntos más altos, para descubrir nuevamente que la ciudad está llena de sitios vacíos, con fachadas a veces y otras con un cerco precario o sitios para estacionar, a pocas cuadras del centro mismo de la urbe. Criticar por qué no se reconstruye la ciudad en todas sus partes perdidas desde el 27F. Hasta descubrir que no estamos solos, este es el texto de Rodrigo Vera, vecino de San Pedro de la Paz, seleccionado en el concurso 2014 de Concepción en 100 palabras; “escucho en televisión que las autoridades decidieron poner en marcha un plan sin precedentes de reconstrucción para Concepción. Se explica que por fin se dará curso legal a los trámites necesarios para obtener las autorizaciones administrativas indispensables que superen la falta de consenso político y evadan las malas prácticas de las anteriores autoridades, así como los obstáculos del pasado, a modo de esclarecer los requerimientos ciudadanos, previo ajuste presupuestarios de las obras, algo que superará definitivamente el problema, sin más rodeos”.

Entonces, cuando se descubre que la tautología es un recurso de mucha utilidad para describir las dificultades de ser ciudad de regiones, siempre a la espera, gracias Don Rodrigo.

 

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