El gerente general, Eduardo Serradilla, declaró que se seguirá trabajando con mucha fuerza. El abogado Mario Rojas añadió que todo vuelve a la normalidad.
La expectación era alta, tanto de la administración, los trabajadores y los usuarios, pero finalmente tuvo un final de película navideña: la Clínica Universitaria de Concepción, CUC, se salvó de la temida quiebra.
Así lo confirmó el gerente general, Eduardo Serradilla Guerrero, del recinto de salud perteneciente a Empresas Masvida.
“Como parte del proceso de Reorganización Judicial (…) a las 13.12 horas se ha acordado la propuesta realizada a nuestros acreedores con un quórum de aprobación de un 100%”, explicó ayer el ejecutivo tras finalizar la audiencia en los Tribunales.
Añadió que “seguiremos trabajando con mucha fuerza y eficiencia para cumplir a cabalidad los compromisos adquiridos en beneficio de todos y en especial de nuestros pacientes”.
Normalidad
Serradilla también tuvo palabras de agradecimiento al Estudio Jurídico Mario Rojas y al presidente del directorio Francisco Garrido.
Rojas, conocido abogado penquista, se manifestó conforme con el logro y enfatizó que ahora la CUC debe seguir mirando hacia adelante con confianza.
“De esta manera se bloqueó la solicitud de quiebra que se había solicitado. Se obtuvo el acuerdo total de los acreedores con derecho a voto en la continuidad efectiva de sus giros y en la reestructuración de sus pasivos que van a ser en un periodo de cinco años”, detalló el jurista.
Una comisión especial estará encargada de monitorear que el acuerdo se cumpla, tal como ocurre en este tipo de casos.
“Sentimos una felicidad de haber terminado un trabajo muy complejo (…) Todo vuelve a la normalidad”, cerró el abogado Mario Rojas, en el capítulo más complejo de este emblemático centro de salud.