Economía y Negocios

Emprendedores requieren formación especializada para lograr el éxito

Por: Diario Concepción 17 de Octubre 2017
Fotografía: Archivo

Maritza Galindo Illanes
Académica de Ingeniería Comercial
Universidad San Sebastián

No basta con el olfato para los negocios, para asegurar el éxito de nuestro emprendimiento debemos considerar las herramientas de las que disponemos, pues el crecimiento de una PYME no es cosa de azar o suerte, sino que requiere mucho esfuerzo, trabajo y desarrollo personal.

En ese sentido, es relevante desarrollar ciertas competencias básicas. Es así que toda persona que decide emprender debe identificar en detalle las competencias que posee, ser realista y evitar sobrevalorar sus capacidades, pues del análisis que realice comenzará un camino largo de formación cuyo objetivo será cultivar las competencias que carece.

Para lograr el éxito en este camino, también se deben conocer las instituciones y financiamientos que ayudan a los emprendedores y a los pequeños empresarios en la concreción de ideas innovadoras.

Las siete características

Según la Comunidad de Emprendedores, las siete características comunes de un emprendedor son: pasión (no interpreta el trabajo como una obligación), ambición (capacidad de asumir riesgos), iniciativa (tienen motor propio), superación (capacidad de tolerar el fracaso reponiéndose y comenzando nuevamente), creatividad (capacidad de solucionar problemas nuevos), liderazgo (visión y capacidad de convocar a otros) y organización (buscar los medios más apropiados para alcanzar sus objetivos).

Al intentar caracterizar el perfil de las personas que deciden emprender nos encontramos con una variedad gigantesca producto de motivos como el contexto, tiempo, situaciones, realidades de vida, etc. En este artículo se consideran dos tipos de perfiles, emprendedores que poseen un título universitario o técnico que desean desarrollar de manera independiente su profesión, y emprendedores que no poseen estudios superiores que desean establecer como una pequeña empresa una actividad desarrollada por un tiempo prolongado.

Ambos perfiles, además de poseer las siete características mencionadas, tienen en común que en su mayoría desconocen cómo desarrollar un negocio a nivel económico y organizacional. Debido a lo anterior y en la búsqueda de los medios para alcanzar sus objetivos recurren a distinto tipos de capacitaciones y carreras vespertinas, ya sean técnicas o universitarias que les permitan gestionar de manera eficiente sus emprendimientos.

Administración, Comercio y otras

Los emprendedores deben considerar la educación superior vespertina como una oportunidad de especialización que les ayude en el desarrollo y crecimiento de sus emprendimientos o pequeñas empresas.

“Prácticamente 9 de cada 10 instituciones de Educación Superior en Chile imparten programas vespertinos dentro de su oferta educativa, siendo las universidades el tipo de institución que más activamente se han incorporado a la inclusión de oferta de carreras y programas vespertinos pasando del 80% a casi el 97%, teniendo una fuerte participación programas de las áreas de Administración y Comercio, Tecnología y Derecho. El nivel de pregrado es el que concentra el mayor número y la mayor tasa de participación de los programas vespertinos. A este nivel, la oferta vespertina representa el 40,3% del total de programas impartidos en el año 2014, mientras que en el postgrado y postítulo representa cerca del 32% del total de programas en su nivel”, de acuerdo a información de Sies, 2015.

Además, de las estadísticas obtenidas del Departamento de Investigación e Información Pública del Consejo Nacional de Educación (Cned) se puede mencionar que el porcentaje promedio de matrícula en programas vespertinos de pregrado en los últimos 5 años es del 27% del total de matrículas.

Cabe destacar que en el año 2017 de las 1.162.306 matrículas de pregrado 296.179 se matricularon en programas de pregrado en jornada vespertina , es decir, del ingreso a carreras de pregrado aproximadamente el 26% corresponde a matrícula vespertina, de los cuales el 47% son estudiantes mayores de 25 años.

No es posible establecer una relación directa entre la cantidad de emprendedores y el número de matrículas en programas de pregado modalidad vespertina, pero sí se puede destacar que las instituciones de educación superior, conscientes de la necesidad de perfeccionamiento o continuidad de estudios, deciden ampliar la oferta de programas de pregrado vespertinos. Se trata de una oportunidad de especialización que los emprendedores deberían considerar para el desarrollo y crecimiento de sus emprendimientos o pequeñas empresas.

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