Fedecarne aseguró que no subirán los precios porque existen otros mercados.
Fedecarne aseguró que no subirán los precios porque existen otros mercados.
Javier Ochoa Provoste
javier.ochoa@diarioconcepcion.cl
Su conformidad con la prohibición decretada por el Ministerio de Agricultura para el ingreso de carnes brasileñas al país tras el escándalo producido en dicho país por carnes contaminadas, manifestó el presidente nacional de la Federación de productores de Carne del país, Carlos González Mufdi, quien además preside la federación a nivel local desde la provincia de Ñuble.
"Es lo que corresponde, el cierre completo a las carnes provenientes de Brasil y no sólo de las plantas afectadas por el escándalo como quería el ministro de Brasil".
Las medidas van bien encaminadas, destacó, aunque precisó que debiera haberse decretado también el retiro de la carne brasileña de las góndolas.
"No podemos arriesgar a la población a consumir sustancias cancerígenas y no debiéramos estar a disposición de las presiones como el cierre del mercado exportador que nos ha hecho Brasil", indicó el directivo, quien agregó que no entiende por qué el Ministerio de Salud estimó que no era necesario incautar las partidas que lograron entrar.
En este sentido, hizo un llamado a la población a no consumir carne brasileña, al menos, hasta que se solucione el problema, lo que no debiera suceder antes de tres meses.
"No es la primera vez que hemos tenido problemas con el mercado brasileño", agregó recordando situaciones como la internación de carne con parásitos ocurrida hace pocos años. Destacó que esta es una oportunidad para que los consumidores pongan atención a la clara desigualdad existente entre las carnes que se importan con respecto a la carne chilena, que cumple los mayores estándares sanitarios a nivel mundial, mientras que "ahora está más que demostrado que las carnes brasileñas no aportan ninguna confiabilidad".
González recordó que este no es un reclamo reciente, sino que es una demanda que se ha hecho por años por parte de los agricultores nacionales que exigen que se eleve el estándar de medición para los exportadores. "El Servicio agrícola y Ganadero hace un monitoreo constante de los productos que entran a Chile, pero aquí volvemos a un punto que se ha discutido anteriormente, y es que el SAG no tiene recursos para tener un inspector en cada planta en Brasil. Eso lleva a que los productores son fiscalizados por entidades de cada país, contratados por el SAG. Aquí hay medidas que podrían tomarse, como realizar una fiscalización al llegar a destino".
González también estimó que junto con la existencia de una irresponsabilidad de los importadores, también una tremenda responsabilidad de los supermercados, que han estado ausentes en esta polémica.