A una semana de la nueva toma en Curanilahue, los ex trabajadores y el seremi de Minería, Lautaro Benítez, iniciaron un diálogo que incluyó a las familias. Durante la tarde de hoy el alcalde de la comuna, Luis Gengnagel, sostendrá conversaciones con Rodrigo Díaz.
A una semana de la nueva toma en Curanilahue, los ex trabajadores y el seremi de Minería, Lautaro Benítez, iniciaron un diálogo que incluyó a las familias. Durante la tarde de hoy el alcalde de la comuna, Luis Gengnagel, sostendrá conversaciones con Rodrigo Díaz.
Felipe Placencia Soto
felipe.placencia@diarioconcepcion.cl
Una semana cumplieron los ex trabajadores de la mina Santa Ana protestando a 600 metros bajo tierra, buscando que el Gobierno de continuidad a las instalaciones y cumpla también con más manutenciones mediante un dinero que fue retenido en la Contraloría General de la República ($1.067 millones, de los cuales ya se han ocupado $500). En los últimos días las negociaciones se han intensificado con la visita del seremi de Minería, Lautaro Benítez, quien dialogó con los dirigentes y algunas esposas de los manifestantes. A su vez, el secretario Addiel Jara, detalló que el alcalde Luis Gengnagel agendó una reunión con el Intendente de la Región del Bío Bío, Rodrigo Díaz en dependencias del Gore a quien dará a conocer las demandas de los mineros, esperando que la autoridad concite una audiencia para conversar en los próximos días.
En ese contexto, Jara informó que si bien la movilización pudo declinar en horas del día sábado, finalmente esto no ocurrió. Detalló también que uno de sus hombres se encuentra en delicado estado de salud, debido a que no manifiesta intenciones de alimentarse adecuadamente.
Es por ello que esperan durante el transcurso de hoy la presencia de paramédicos que serán enviados por la Municipalidad de Curanilahue. "Lleva varios días en que sólo duerme. Está un poco complicado" reveló Jara ,quien prefirió reservar la identidad del minero.
Espera que las gestiones de hoy entre la primera autoridad comunal y el intendente sean positivas . "Nosotros no queremos buscar una solución parche nada más. Buscamos que los afectados queden asegurados de trabajo. Por eso nosotros estamos enfocados en la continuidad de la mina. En l a continuidad laboral", enfatizó Jara.
Ilusión y desilusión
De acuerdo al secretario de los mineros de Santa Ana, el Gobierno Regional los ilusionó y luego los desilusionó.
"Ilusionaron a la gente con el protocolo de acuerdo, de que iban a a buscar la fórmula para la continuidad de la mina. El mismo Gobierno tuvo la idea de después de que pidiéramos un crédito al Banco Estado para pasarnos y poder nosotros funcionar con la mina (…) ahora nos desilusiona diciendo que están las puertas cerradas", recordó Jara.
Uno de los designados para hacer esta gestión fue el ex seremi de Hacienda Renzo Galgani, quien viajó hasta Santiago para manifestar al presidente de la entidad Bancaria, Jorge Rodríguez Grossi, la necesidad de contar con un préstamo de $250 millones de pesos (hoy el valor cambió, ya que la tasación es de $500 millones).
Galgani explicó a Diario Concepción hace unos días que la respuesta se quedó de hacer llegar a los dirigentes, quienes confirmaron que el Banco Estado les negó la petición.
Finalmente, Galgani fue desvinculado de la Seremi de Hacienda. Eso sí, sigue en contacto con los mineros en calidad de emisario del Senador Alejandro Navarro y como líder de las juventudes del partido País. Hace unos días estuvo con ellos.
Así entonces, sólo resta el resultado de la empresa contratada vía licitación mediante dineros de Corfo, Vallendar Limitada, para realizar un estudio que indique la viabilidad técnica y económica para los mineros y la administración de las instalaciones.
El plazo para ello "es de cuatro meses", acotó el director regional de Corfo y del Comité de Desarrollo Productivo Bío Bío, Juan Mardones.
En medio de esto, los mineros están en conocimiento de un particular que tendrían intenciones de comprar la mina, el empresario local Isaac Alarcón, quien se reunió con los dirigentes, los que estaban abiertos a la posibilidad.
Sin embargo, Alarcón declinó la opción, argumentando que sólo contaba con $130 millones.
La duda quedó por parte de los trabajadores, ya que el liquidador y representante legal de S.W. Curanilahue S.A., Tomas Andrews Hamilton solicitó una sesión extraordinaria para ofrecer a la junta acreedora una alternativa, que sería un comprador. No se sabe si sería este mismo empresario u otro no contemplado.
Finalmente, esta junta se suspendió hasta nuevo aviso, dejando más dudas en el ambiente que se vive a cientos de metros bajo la superficie quienes hoy denunciados por robo con fuerza en lugar no habitado por parte de Tomas Andrews, ya que durante dos semanas explotaron la mina sin permiso.
Imposible
El conflicto no tendría un fácil término, ya que el seremi de Minería, Lautaro Benítez, sostiene que el Gobierno no tiene las herramientas técnicas ni jurídicas para adquirir la mina hoy tasada en $500 millones.
El día viernes los mineros tomaron contacto con Benítez, quien viajó inmediatamente hacia Curanilahue, donde se activó una negociación en la cual participó el presidente de los extractores de carbón, Luis Chandía.
"Fue una conversación fluida con un diálogo franco y transparente. Quedaron los canales de comunicación abierto. Yo voy a atender cualquier llamado que ellos requieran. Reiterar que el compromiso del Gobierno está cumplido. Esperamos por parte de estas personas que depongan la actitud, que hoy día recapaciten y reflexionen y vuelvan a sus casas", llamó el seremi Benítez, quien el sábado se reunió con algunas esposas, declinando la invitación para asistir a la mina, acotando que las platicas deben ser en un lugar donde se garanticen condiciones.
Sus dichos se enmarcan en la cantidad monetaria desplegada por el Gore Bío Bío: $1.790 millones en 200 mineros tanto de Santa Ana como Chilecar. De hecho, el director del Sence Bío Bío, Daniel Jana, llamó a no olvidar que todo se originó por la "irresponsabilidad de un privado".
Pese a lo señalado por el seremi Benítez, el secretario de los mineros de Santa Ana, Addiel Jara, argumentó que el Gobierno debe hacer otro esfuerzo para que ellos adquieran la mina y así dar sustento a sus hogares. De ahí que estarán a la espera de que el intendente Rodrigo Díaz se sume.