Los neumáticos son una de las principales medidas de seguridad dentro de los vehículos motorizados, y por ello, su cuidado y mantención es un aspecto importante en el uso diario.
Por ello, aquí exponemos algunos consejos que pueden ayudar a mejorar su durabilidad y rendimiento:
Revisar la presión de aire: Se debe hacer al menos una vez al mes. Por lo general, respetar la presión que propone el fabricante, que en algunos modelos se encuentra escrita en el canto de la puerta del piloto. Ahora, se debe ajustar también si el vehículo va a moverse con más carga de lo habitual, y esto debe hacerse idealmente con los neumáticos en frío.
Rotación: intercambiar los neumáticos por parejas hacia el eje de tracción ayuda a que estos se degraden de forma pareja. Por lo general, la recomendación es hacer este procedimiento cada 10.000 kilómetros.
Revisar los bordes: Verificar la inexistencia de cortes o deformaciones que puedan generar un reventón del neumático en velocidad.
Revisar la profundidad del dibujo: El agarre de los neumáticos dependerá de este factor. Por ello es importante sean reemplazados una vez que la profundidad del dibujo es menor a la que pide la legislación en Chile, que es de 2mm en la parte más desgastada.
Evitar las frenadas bruscas: En vehículos sin frenos ABS, bloquear los neumáticos en una frenada es muy dañino para la vida útil de los neumáticos y para que estos mantengan su circunferencia.
Por otra parte, el alineamiento y balanceo de los neumáticos ayuda a evitar vibraciones al conducir, lo que permite un mayor control del vehículo en velocidad y una mayor estabilidad al doblar y frenar.
Todos estos consejos ayudan a que los neumáticos tengan una mayor vida útil, entreguen mayor seguridad y no generen altos costos de mantención para el vehículo.