Cultura y Espectáculos

Intensidad y emoción tendrá sexto sinfónico de la Orquesta UdeC

Bajo la batuta de Mika Eichenholz, director titular y artístico de la agrupación, se interpretarán obras de Wilfried Junge, Serguéi Prokófiev y Franz Schubert.

Por: Mauricio Maldonado 27 de Julio 2019
Fotografía: Isidoro Valenzuela M.

Retomando la batuta de la Orquesta UdeC, hoy a las 19:00 horas, el maestro Mika Eichenholz encabezará un intenso programa de tres obras en el marco del sexto concierto sinfónico de la presente temporada.

Si bien no son tantas las piezas, el director sueco destaca la gran intensidad de la presentación. “Por ejemplo, en ‘Romeo y Julieta’, de Serguéi Prokófiev, los momentos más intensos no son los de mayor exaltación musical, sino más bien los de carácter introvertido e íntimo como ‘La muerte de Julieta’. Es una obra intensa en otra dirección y manera. Si bien es bonita cuando se presenta con ballet, es fantástica sin ese apoyo”, dijo la batuta.

Añadiendo que “en este caso, hacemos dos de las tres suites, pero no es el orden dramático habitual, sino que yo lo reordené en un sentido musical y no dramático. Seguí la tradición europea, pero con ciertos cambios. Por ejemplo, no terminamos con la ‘muerte de Teobaldo’ que es muy sonoro. Es más emocionante un término más calmo y no tan precipitado sonoramente”.

En el otro extremo del programa, es decir, para abrir el concierto, se interpretará “Divertimento”, de Wilfried Junge. Compositor que ha sorprendido gratamente a Eichenholz, ya que desconocía sus obras y talento, calificándolo como un adelantado a su época.

“Estaba muy conectado con lo que estaba sucediendo en la música de su tiempo y más, muy contemporáneo con el pulso que estaba siguiendo el sonido en el mundo. Se nota su gran talento en sus obras y la que interpretamos no será la excepción”, destacó el maestro.

Mientras que sobre la pieza que va en medio del programa, “Sinfonía N°3” de Franz Schubert, el director apuntó que “se notan ciertos elementos de Rossini, ya que en la época en que fue escrita, él estaba en su apogeo de popularidad. Es una obra tremendamente interesante y que este último tiempo la he dirigido varias veces. Me fascina”.

Eichenholz hizo hincapié en lo complejo de la interpretación de las obras, enfatizando la calidad que debe tener la orquesta que las toque. “En este caso, demostraremos lo mucho que se ha trabajado en ello, lo entusiasta que están los músicos en interpretar el repertorio y el público lo notará”.

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