Si bien el panorama de los escenarios locales ha cambiado, trasladando la actividad a diferentes sectores, las bandas han proliferado en estilos y producción.
Hace años que la vida nocturna penquista musical cambió y trasladó su actividad a distintos puntos de la ciudad. Si bien la primera década del 2000, el Barrio Estación gozaba de una bohemia saludable y con locales que no daban a vasto por la gran cantidad de público, estos últimos años se han dispersado las alternativas y escenarios de dónde escuchar música en vivo, gatillado en parte por la gran cantidad de bandas que han profesionalizado sus propuestas, y también por la delincuencia que vivió durante un tiempo aquel barrio.
Aunque un tiempo la Bodeguita de Nicanor y Casa de Salud se llevaron a gran parte de la gente que quedó “viuda” del recordado Beer House o Choripán -donde ahora existe el Bar 542 y que mantiene de cierta forma esa esencia roquera- en la Plaza Perú y sus alrededores han emergido espacios con propuestas interesantes y de calidad, como Bar Callejón o Bar Galería Aura.
Lugares clásicos y que no han aflojado su marcha, como Mal Paso o El Averno, han aportado y acogido de gran manera a la bohemia musical penquista, esa que vivo y vibra más allá de sólo el rock.
Discotheque y club nocturno que se ha ganado un espacio importante de la bohemia penquista.
Dividido en tres salones, dos escenarios y tres pistas de baile -que en total alcanza una superficie de alrededor de 2.000 metros cuadrados- se caracteriza por una constante parrilla programática musical variada y bien miscelánea.
Gentileza casasalud.cl
Es así como cada semana se dan cita la electrónica -con DJ’s locales, nacionales e internacionales-, el pop, folk, rock, jazz, música del mundo y sonidos experimentales dentro de sus dependencias. Dejando en claro que, si bien reciben constantes visitas de artistas de fuera de la Región, la música de factura local tiene aquí un lugar asegurado.
Más allá de la música, el arte también es primordial en CDS, lo que se hace notar en sus muros y ornamentación en general.
“Por sueños nacimos y por la cultura y bohemia penquista vivimos”. Es la razón de ser de este insigne bar y uno de los espacios predilectos del carrete local.
A comienzos de mes cumplió 6 años de trayectoria, ocasión que fue celebrada con una gran fiesta que tuvo como cabeza de cartel a los argentinos de Ataque 77.
Destacado por ser un espacio predilecto de las cuecas choras, la trova y la pachanga más diversa, también brilla por dar cabida a diferentes expresiones y propuestas musicales, tanto locales emergentes y consagradas, como también grupos y artistas nacionales de dilatada trayectoria.
Los invitados internacionales también son parte de la degustación de su carta de especialidades sonoras. Una que cada semana sorprende por su variedad.
Aunque hace unos años atrás estuvo en peligro su continuidad, un matrimonio amante de la música decidió invertir en mantener el prestigio y renombre de este local, agregándole también nuevos aires y características, siendo, obviamente, la música el ingrediente principal.
Gentileza Lucho Astudillo
“Uno de nuestros fundamentos es que la música debe vivirse a diario, y una forma de hacerlo es disfrutando de espectáculos en vivo sin tener que pagar una entrada y sin la necesidad estar exudando adrenalina en el acto”, destacan dentro de su declaración de principios en fan page.
Y así es, con una nutrida y variopinta cartelera que se sostiene semana a semana con increíbles bandas tributo y también con sonidos originales de bandas consolidadas y emergentes de la zona.
Si bien no tiene la magnitud y dimensiones de otros bares de la ciudad, Mal Paso goza de un renombre y una calidez acogedora única dentro de la bohemia penquista.
Buenos tragos, chelas y conversación al calor de sincopadas melodías es marca registrada de su escenario. El jazz se vive, respira y siente en su atrayente ambiente, en una cartelera que cada semana tiene combinados o ensambles con intérpretes novicios y experimentados del estilo, ya sea créditos locales y también nacionales.
Del jazz más clásico, swing, gypsy, bebop, hasta la fusión son panoramas fijos de prácticamente todas las noches de esta mítica esquina del Gran Concepción.
“Queremos volver al origen sin olvidar nuestra historia” es la frase madre que guía u orienta el accionar de Bar Callejón.
Gentileza Bar Callejón | Facebook
El que fuera un antiguo salón de pool, se ha convertido en un imperdible de la cartelera y costumbre del carrete local. Más allá de exquisita carta y generosa variedad de cervezas artesanales, su escenario se ha ido abriendo a distintos estilos musicales, destacando entre ellos el jazz. Artistas de renombre internacional, como Wayne Hussey (The Mission) también se han dado cita en este confortable local.
“Cultura, música, entretención e integración son parte de la experiencia de nuestro bar”. Es el principio central que imprimen en su propuesta Bar Concepción.
Un camino que han logrado forjar al ritmo de buenas y variadas melodías, en que los sonidos netamente penquistas mandan.
Más allá de poder disfrutar de una buena cerveza y un grato ambiente, la música es parte esencial de su cartelera, que al igual que otros bares similares en su tipo, renuevan cada semana con misceláneas y diversas bandas, las cuales abarcan los más disímiles estilos.
Los solistas y de factura más electro acústica son la especialidad de la casa, privilegiando, además, los números más frescos y emergentes de la movida musical local.
Un espacio que ya con un par de años de carrete, se ha ganado un lugar predilecto dentro de la ruta de la música en vivo local. Fuera de tener una apreciada cocina gourmet, destaca por tener un rincón privilegiado para el arte y los sonidos de factura local.
Sin tener algún tipo de restricción o línea curatorial musical, su cartelera semanal se nutre de las más variadas propuestas y estilos musicales. Es así como la electrónica, jazz, funk, folk, reggae, rock y más conviven dentro de su atractiva parrilla melódica, siendo los artistas locales y de la zona -por lo general- los que brillan con sus sonidos.
REFUGIO BAR (Maipú 122)
Otro imperdible y parte del inventario de la movida musical local lo es Refugio Bar.
Con una mirada más transgresora y orientada a los sonidos de corte más duros (metal, hard core, punk, etc.), este espacio no ha decaído con los años, por el contrario, se ha fortalecido y nutrido de los nuevos talentos de la escena under penquista y alrededores.
Bandas y artistas del lado más emergente han pasado por su escenario, el cual tampoco está ajeno a recibir grupos más experimentados.
Aunque está enfocado a ser un pub más del buen beber y comer, la música igual suena dentro de su carta de especialidades. Con un formato más bien de corte acústico, bandas tributos y artistas locales han sido parte, y son, de la oferta musical que destilan cada semana.
Aunque en estos momentos está pendiente su situación legal de funcionamiento -por un tema de patentes que aún el municipio penquista no resuelve-, no cabe duda que se ha convertido en un espacio fundamental de la música en vivo en la ciudad.
Con una propuesta variada de estilos -jazz, funk, punk, DJ’s, y más- el rock y las guitarras eléctricas son el fuerte del local.
Gentileza larata.cl
Grupos locales, ya sea emergentes y con algo más de carrete, se han dado cita en su escenario, al igual que las bandas tributo. Artistas nacionales y nombres internacionales de la música -como el destacado Alain Johannes (foto)- han sido parte de programación.
Si bien la electrónica y los DJ´s se han apoderado de la cartelera de LOE estos últimos años, su nombre fue cimentado a punta de rock, pop y folk. Grandes créditos de la música local y nacional, han sido parte de su historia melómana sonora.
La ex KnockOut discotheque igual ha sido epicentro de importantes eventos musicales, congregando a nombres destacados de la escena musical penquista y también nacional. Su especialidad actual es la electrónica con DJ’s fijos e invitados.
Si bien en estricto rigor no está dentro del circuito netamente penquista, este local merece una mención dentro de la ruta sonora de la intercomuna.
Con años de trayectoria el Zalsi Puedes es la “joya” de los escenarios de la música en Talcahuano. Con sus puertas abiertas a grupos y artistas nacientes y consagrados, ofrece un escenario con las condiciones técnicas óptimas y de calidad para desplegar un show como corresponde.
Los estilos son igual de variados que los músicos que los interpretan, aunque tiene un sello cargado al rock.