Cinco pinturas y cinco litografías suyas son parte del archivo de la Pinacoteca UdeC. Además, expuso varias veces, en solitario y colectivamente, en la galería El Caballo Verde.
Cinco pinturas y cinco litografías suyas son parte del archivo de la Pinacoteca UdeC. Además, expuso varias veces, en solitario y colectivamente, en la galería El Caballo Verde.
Ricardo Cárcamo Ulloa
ricardo.carcamo@diarioconcepcion.cl
Es una figura transversal no solo de las artes visuales nacionales, sino también por su trascendencia en el ámbito político. Nacido en España, pero con una larga residencia en Chile, la muerte de José Balmes produjo un duro golpe en la cultura del país y también a nivel local. Ello porque a lo largo de su trayectoria, él junto a su esposa, Gracia Barrios, vinieron en numerosas ocasiones.
De hecho, en el archivo de la Pinacoteca UdeC hay cinco pinturas (óleos y técnica mixta sobre tela) y cinco litografías suyas.
Sandra Santander, curadora de la Pinacoteca, señaló que "Balmes estuvo en la Escuela de Verano del 2003 ‘Mitos fundacionales de América’, con una exposición y con participación en mesas y talleres. Tenía especial interés por nuestra ciudad, ya que acá también se realizaba el Salón Sur, concurso de pintura y grabado que organizaban El Sur y la Universidad de Concepción, y en un par de ocasiones fue jurado de este certamen".
De la importancia y legado de su obra, indicó que "su figura es fundamental para el arte nacional. Tanto sus exilios como su labor docente en Chile y Francia, le hicieron recorrer otros centros artísticos y estar atento a las nuevas corrientes artísticas que divulgaba entre sus amigos y alumnos".
A lo largo de su trayectoria, visitó en varias oportunidades El Caballo Verde. En 1992, fue parte de la muestra "Cinco pintores chilenos en Sevilla", y en 2003 junto a su esposa trajeron "B.B.B", en exposición por los 18 años de la galería.
Carmen Azócar, dueña del espacio, lo conoció hace muchos años, y señaló que "era persona muy encantadora, simpática y con mucha cooperación con todos los artistas, fue generoso de muchos puntos de vista. Pintor de gesto espontáneo, apasionado, y lo que me queda de su trayectoria, aparte de su talento y creatividad, que siempre expresó de forma maravillosa la visión de libertad. Siempre tenía esa actitud frente a la libertad, por eso levantaba la voz frente a algún atropello sobre un artista".
De la relación con El Caballo Verde, indicó que "expuso unas cuatro o cinco veces en solitario, y otras colectivamente, la última la de las 3B. Recuerdo que cuando iba a abrir (1985) |, que fue con una exposición de la Gracia, no tenía un afiche o un letrero. Él me preguntó si tenía un diario, tomó la tijera, lo cortó e hizo un cartel espectacular. Lo admiro mucho, era un gran conversador y generoso con los nuevos artistas".
Faceta política
Además de su labor creativa, sin dudas que Balmes fue un referente también en este ámbito, pues se mostró como un hombre con una posición clara y activa, lo que igualmente influyó en su labora pictórica.
Al respecto, Santander indicó que "su condición de pintor comprometido políticamente le hicieron explorar otras formas de expresión, con materiales no convencionales para construir su propio relato, que a menudo usaba para denunciar, tanta barbarie u otra injusticia. Balmes fue un artista adelantado, original, transgresor y sobre todo consecuente con su pensamiento, su legado en el campo de las artes chilenas ya está, y con toda razón, en las páginas de nuestra historia cultural".
Albino Echeverría dijo "que estuve en un par de ocasiones con él, y si bien el contacto fue mínimo, deja como legado una actitud política muy definida, íntegra, y al mismo tiempo su proyección como artista, que indudablemente es muy valiosa. Nunca negó su condición de hombre de izquierda y combatiente más encima, de una postura radical importante".