En cuatro núcleos se divide la publicación, que aborda temáticas como la interpelación de voces y textos del pasado, desafíos y responsabilidad del sistema universitario, y estudios universitarios.
En cuatro núcleos se divide la publicación, que aborda temáticas como la interpelación de voces y textos del pasado, desafíos y responsabilidad del sistema universitario, y estudios universitarios.
Ricardo Cárcamo Ulloa
ricardo.carcamo@diarioconcepcion.cl
Luego de un trabajo intenso y muy detallado, como caracteriza a cada uno de sus ejemplares, el nuevo número de revista Atenea ya está terminado. Se trata del 513 de su rico historial, y su director Edson Faúndez se refirió a los contenidos de esta reciente publicación.
En primer lugar, se refirió a los contenidos, que en esta ocasión fueron divididos en cuatro núcleos. "El primero reúne, fundamentalmente, artículos del ámbito de los estudios literarios. El segundo, considera artículos que acogen críticamente la interpelación de voces y textos del pasado. Por su parte, el tercer, se nutre de artículos que inciden en el debate sobre los desafíos y la responsabilidad del sistema universitario. Y el cuarto, y final de escritos que revelan la pervivencia de la pulsión etnófaga en Chile, que impide la emergencia de un país verdaderamente interétnico y multicultural", señaló.
Sobre el número de autores que participaron en este número, Faúndez comentó que "el primer número de 2016 (Atenea es una publicación de carácter semestral) se articula sobre la base de dieciséis artículos de investigadores de universidades de Chile, Venezuela, Argentina, Colombia, España, Grecia y Bélgica".
En ese sentido, agregó que "la revista, como indica su presentación, responde así al ‘compromiso de contribuir a la articulación de comunidades de pensamiento, capaces de abordar, desde diferentes perspectivas, temas y problemas de relevancia cultural’".
Faúndez también indicó respecto a los autores presentes, y en general a los que siempre aportan a la publicación, que realizan un aporte que permite llegar mucho más allá de los límites puramente académicos.
"Estas comunidades de pensamiento exceden el ámbito estrictamente académico, en la medida en que conjuran la participación de los lectores, quienes amplifican y fortalecen los debates culturales sugeridos en los artículos que publica Atenea", aseguró el director de la revista.
Mirando al futuro
Faúndez asumió este año la conducción de Atenea, sucediendo a Mario Rodríguez, quien desempeñó esta función por muchos años. Si bien señaló que es muy pronto para hacer una evaluación de lo desarrollado hasta el momento, se refirió a cómo ha sido su labor hasta el momento, y también de la forma en que proyecta a corto y mediano plazo el futuro de la publicación.
"Dirigir Atenea es un privilegio y una responsabilidad. Estimo que hay un rasgo que puede definir la orientación que le hemos intentado dar a la gestión administrativa de la revista, aunque aún es muy pronto para descubrir logros y errores", comenzó diciendo al respecto.
Además, comentó que "se trata del encuentro armónico de dos exigencias ineludibles, que se inscriben en el sentido y finalidad de Atenea: la preservación de los signos distintivos de la revista y la necesidad de una proyección adecuada hacia el futuro".
En cuanto a cambios o proyectos que anticipa para el trabajo venidero de la publicación, Faúndez señaló que entre las ideas están "la renovación parcial del consejo editorial, el incremento de la difusión nacional e internacional, la determinación de publicar sólo artículos (Atenea publicaba hasta el número 511 artículos, notas y reseñas) y la ampliación de la nómina de evaluadores de artículos que postulan a la revista, entre otros proyectos ejecutados o en desarrollo, responden a dicha orientación".
De los objetivos de esta modificaciones, el director de la revista indicó que "esperamos que estos proyectos permitan que Atenea intensifique aún más los niveles de excelencia que la distinguen y su prestigio en el contexto cultural latinoamericano".