Autoridades de Chile y Argentina destacaron el rol clave del Biobío en un corredor bioceánico que integre producción, exportaciones y empleo. junto a actores portuarios, reforzaron el llamado a concretar obras de conectividad y mejorar la asociatividad.
Por Catalina Poblete Sánchez
La Región del Biobío fue el escenario de una nueva jornada de articulación estratégica entre autoridades regionales de Chile y Argentina, instancia que busca robustecer el intercambio comercial y logístico a través de un corredor bioceánico que conecte el Atlántico con el Pacífico.
La iniciativa se proyecta sobre la base de la infraestructura existente y propone a Biobío como eje de una plataforma logística para toda la macrozona centro-sur.
El gobernador del Biobío, Sergio Giacaman, enfatizó que la meta es que cada región aproveche sus ventajas comparativas para consolidar una macrozona integrada y competitiva.
“No se trata solo del Biobío: cada región debe trabajar sobre sus características y apoyarnos mutuamente”, señaló Giacaman, destacando también el respaldo del gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, para la próxima reunión del Comité de Integración, fijada para el 25 y 26 de junio.
Por su parte, el cónsul trasandino en Concepción, Ignacio Guillermo Livy, recordó que esta cooperación no es nueva sino la continuidad de décadas de trabajo interregional. “Lo que anunció el gobernador no es otra cosa que la continuación de un proceso que lleva décadas. Estos comités de integración surgen del deseo de destacar lo que nos une más que lo que nos separa, y permiten avanzar en aspectos concretos cuando hay voluntad política”, afirmó.
Livy subrayó, además, el impacto del yacimiento de Vaca Muerta en Neuquén, que ha impulsado el empleo y el crecimiento económico, aunque también ha generado desafíos logísticos, sociales y de infraestructura.
“Muchas personas están migrando dentro de Argentina hacia Neuquén, generando demanda de hospitales, escuelas y más servicios. Esto genera nuevas oportunidades, pero también exige mayor coordinación regional y binacional”, explicó.
El enfoque, coincidieron las autoridades, es que el Biobío se transforme en un punto estratégico que, mediante sus puertos, terminales y red de infraestructura, facilite las exportaciones e importaciones del sur argentino, principalmente desde puntos como Neuquén, Río Negro y Chubut.
Pablo Passeron, gerente general del Terminal Portuario Talcahuano, destacó el potencial no explotado de la infraestructura local: “Todavía estamos siendo subutilizados. Sería muy importante que las más de 19 millones de toneladas que se transfieren por los puertos de la región pudieran aumentar si sumamos la carga de regiones vecinas y de Neuquén. Más carga es más trabajo: más transporte terrestre, más ferroviario, más movimiento en los puertos”.
Desde el Maule, el gobernador, Pedro Álvarez, también apostó por la integración como vía para fortalecer las economías locales.
“Nosotros desde el Maule hemos estado promoviendo esta bilateralidad con el país Argentino. Estamos fortaleciendo nuestro paso Pehuenche, estamos invirtiendo en él porque sabemos que es una oportunidad importante no solamente para el Maule sino que también para Biobío. Tenemos industrias similares en agricultura, pesca y forestal, y es clave potenciar eso para crear empleo”, aseguró.
Álvarez fue enfático al señalar que, si bien las regiones enfrentan desafíos administrativos y presupuestarios, deben enfocarse en priorizar inversiones que puedan tener un impacto real en la ciudadanía. “Estamos muy contentos y empeñados en salir adelante con nuestras regiones, esta macro zona sin duda que es una oportunidad distinta e importante para nuestro país”, añadió.
Para el gobernador Giacaman, este nuevo impulso regional no puede quedar sólo en declaraciones al aire, “en el caso particular de rutas tan relevantes como la ruta Piedemonte, en mi caso yo he estado insistiéndole al gobierno de la urgencia que esa ruta significa y así también de buscar alternativas para mejorar la conectividad, especialmente el tramo que conecta Coronel con San Pedro, porque la ruta Piedemonte va a estar lista en 10 años”, afirmó.
Finalmente, el gobernador de Neuquén reforzó el valor de esta asociación: “Tenemos una buena relación y queremos que se sumen más regiones. Lo más importante hoy es que las autoridades políticas y empresariales comprendan lo que está pasando al otro lado de la cordillera”.
La próxima cita será a fines de junio en la ciudad de Neuquén, donde se espera avanzar en compromisos concretos que refuercen el corredor bioceánico y la plataforma logística del Biobío como eje de este espacio de integración internacional.