Tanto en áreas rurales como urbanas, los residentes advierten sobre ataques en jauría.
La proliferación de perros vagos existentes en las diferentes comunas del Gran Concepción es, según los vecinos, un problema importante que se reproduce con rapidez y que pone en riesgo a las personas.
Moisés Ríos, presidente de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Concepción, aseveró que estos están en todos lados. “En pleno centro de Concepción en Aníbal Pinto con O’Higgins tenemos una persona en situación de calle con una manada de perros que atacan a los vecinos. También hay en Barrio Norte, Palomares y Nonguén”, detalló y agregó que en Palomares, sector donde vive, hace pocos días una persona resultó mordida por dos canes.
Ríos complementó que más que esterilizar los perros vagos, se debe hacer una llamado a la conciencia para que exista una tenencia responsable. “Muchos se dedican a pedir perritos y después los dejan abandonados, como fue en el caso de Juan Riquelme cuando desalojaron la toma”, dijo y afirmó que el municipio debe hacer campañas para incentivar la tenencia responsable.
En el puerto la situación es similar. Mauricio Concha, presidente de la Junta de Vecinos de los Cerros de Talcahuano, afirmó que la presencia de perros vagos es generalizada, pues se encuentran en Los Lobos, Nueva Los Lobos, Los Copihues, el acceso al Parque Tumbes, entre otros sectores.
“Es un problema generalizado. La población canina ha crecido considerablemente en los cerros. Afuera de las casas en las que se les da comida hay hasta 8 perros que, muchas veces, atacan en jauría a los vecinos”, afirmó y agregó que el municipio realiza esterilización, pero no los lleva a algún lugar para proteger a los vecinos.
Desde el municipio de Talcahuano confirmaron la existencia de perros abandonados en la Isla Rocuant, aseguraron que además de la concientización de la comunidad con respecto a la tenencia responsable (Ley 21.020), debido a la compleja manipulación de los canes aplican el método TNR, que consiste en tomar al perro, esterilizarlo y regresarlo al lugar en que fue encontrado.
El encargado de Zoonosis del municipio de San Pedro de la Paz, Aldo Parada, aseveró que los sitios con mayor incidencia de abandono de perros son Caleta Alto Rey en Boca Sur y el sector Costanera que abarca Boca Sur, Michaihue y San Pedro de la Costa.
El profesional explicó que debido a que no hay evidencia de la existencia de jaurías de perros asilvestrados, no hacen campañas preventivas para que la gente no se acerque a esos lugares, pero comentó que en 2023 realizaron inspecciones relativas a un total de 148 denuncias, por diversos motivos, principalmente, sobre tenencia responsable.
Desde el municipio de Hualpén indicaron que han detectado que personas inescrupulosas abandonan animales en sectores de la Península de Hualpén, y en particular en la Caleta Lenga. Animales que, en general, no están esterilizados, por lo que se reproducen y generan a largo plazo el carácter asilvestrado.
Afirmaron que han trabajado en la educación de la comunidad, con el lema “porque a un amigo no se le abandona” y, también, constantemente, fiscalizando, recalcando que los animales no deben deambular libremente, solicitando cierres perimetrales, paseos de arnés y métodos de sujeción.
Además, según indicaron, realizan operativos de esterilización de caninos, para bajar sus niveles de agresividad y/o ansiedad, además de aplicar vacunas antirrábicas. Trabajo que continuarán haciendo y que se reforzará con la pronta llegada de una Ecoclínica Veterinaria Móvil que están adquiriendo y que aportará a dicha labor.
El área rural no se libra del problema. Susana Angulo, encargada de la Oficina de Zoonosis del municipio de Santa Juana, aseguró que la comuna tiene perros “comunitarios”, que alimenta la gente, de los que hay 20 en el sector urbano.
“Y otros en situación de abandono, que se ha vuelto recurrente, en sectores rurales como Tricauco, Huallerehue, entrada de Tanahuillín, subida el Litre y Chacay”, sostuvo.
Para controlar la situación, dijo, el municipio realiza campañas de esterilización, desparasitación y vacuna antirrábica. “Hacemos todo un manejo sanitario para que cuando los adoptan se vayan en las mejores condiciones. Tenemos un programa llamado adopta un amigo que los entrega esterilizados, con control sanitario y microchip. En casos en que los perritos son muy adultos y nadie los adopta, ofrecemos a las familias alimentación”.
Además la comuna cuenta con convenio de atención de urgencia con dos clínicas de la zona para atender a canes en malas condiciones, por ejemplo, atropellados que, una vez rehabilitados, son publicados en las páginas del municipio para entregarlos en adopción.
Por otra parte, cabe destacar que el proyecto de Ley que permitía la caza de perros asilvestrados, es decir, que hayan nacido o vuelto a su estado salvaje, sin supervisión o control humano, fue rechazado en la Cámara Baja.
El diputado Félix González instó a hacer valer primero las leyes existentes, como la de tenencia responsable, antes de proponer medidas que podrían no abordar adecuadamente la problemática.
Lukas Castillo, médico veterinario del Hospital Clínico Veterinario de la Universidad de Concepción, del campus Chillán, aseveró que el problema de los perros vagos es crónico y que requiere soluciones a corto, mediano y largo plazo.
Lo primero, aseveró, es fiscalizar a los dueños de los caninos que se encuentran en las calles y que generan problemas en la vía pública.
A mediano plazo educar a la población sobre la problemática de salud pública y los peligros que generan, tanto los perros vagos como los asilvestrados, partiendo por el hecho que si atacan a alguien, nadie se hará cargo.
A largo plazo se debe, dijo, estimular la esterilización, educación de escolares a adultos indicándoles que es un problema que afecta a toda la población. “Debe ser un trabajo en conjunto desde los veterinarios, municipalidades, juntas de vecinos, centros de rescate de animales para concientizar sobre los impactos que tiene la presencia de perros vagos en la calle”.
Lamentablemente, según afirmó, el manejo de dichos animales no está claro, materia en la que se debe trabajar, pero puntualizó que, en ningún caso, “la eutanasia es una solución viable a este problema crónico”.