Señora Directora:

En esta época del año, cuando el espíritu de la Navidad nos invita a reflexionar sobre el amor, la unión y la generosidad, es el momento ideal para extender una mano solidaria hacia quienes más lo necesitan.

En Chile, muchas familias enfrentan situaciones de vulnerabilidad que dificultan vivir estas fechas con esperanza, calidez y la alegría que todos merecemos.

Niños y niñas en situación de pobreza, adultos mayores en abandono, personas en situación de calle y comunidades afectadas por desastres o precariedad económica son solo algunos de los grupos que necesitan de nuestra empatía y apoyo.

Hoy podemos acceder a variadas iniciativas que buscan despertarnos de la indiferencia y la vorágine de consumo. Ejemplos hay muchos.

Tenemos campañas de juguetes, a cargo de organizaciones locales o parroquias; almuerzos, cenas o canastas navideñas, así como el apoyo a fundaciones y hogares de adultos mayores que movilizan a voluntarios y a gentiles donaciones.

Todas estas iniciativas nos pueden conectar con esta época especial a través de una visita, un obsequio o simplemente un momento de compañía

La Navidad nos invita a fortalecer los lazos que nos unen y a demostrar que juntos podemos construir una comunidad más solidaria e inclusiva; hagamos que estas vísperas sean un tiempo de luz y esperanza para todos.

Claudio Riquelme Neira
Director de Trabajo Social
Universidad San Sebastián