Señor Director:
Ver a Paul McCartney con ese nivel de energía arriba del escenario, sostenida a lo largo de los últimos 50 años, sólo se explica porque disfruta “a concho” lo que hace frente a sus fieles seguidores, y no por el dinero, que ya tiene mucho. El gran secreto de su adrenalínica y entretenida vida es haber trabajado siempre en lo que más les gusta y lo demuestran a raudales.
¿Cuántos chilenos hoy, tienen la dicha y la fortuna de trabajar en lo que más les gusta y muy bien remunerados? Un gran reconocimiento a todos los que no tienen esa suerte, pero igual tienen la mejor disposición para atender y ayudar a quienes los requieren con la mejor de las sonrisas.
Luis Enrique Soler Milla