Carta al director

Ruta Costa Arauco

Por: Diario Concepción 26 de Junio 2018

Señor Director:

Cuando la empresa Acciona iniciaba trabajos en la Ruta 160 posterior al terremoto del 27F, su Cristián Encalada, aseguraba que la autopista significaría para los habitantes de la provincia de Arauco una disminución y certeza en los tiempos de viaje, aparejado a un aumento de la seguridad vial y peatonal. Asimismo, generaría un mejoramiento significativo de la accesibilidad de la población de ese territorio a los servicios del Gran Concepción.

También dijo que implicaría un aumento de la eficiencia en el transporte de carga forestal, lo que mejora la competitividad de la industria local y un crecimiento de la industria turística de la provincia, al perfeccionarse el acceso hacia los atractivos naturales y de intereses especiales que caracterizan a la zona sur costera de la Región del Bío Bío.

A ocho años de dicha afirmación, la realidad es totalmente distinta. Su empresa vendió a otra concesionaria por lo cierto (Globalvia, misma de Ruta Del Itata, la segunda mas cara de Chile), teniendo como resultado una carretera no finalizada, con estándares de calidad inferiores a los de cualquier otra autopista concesionada de la Región. Con reducciones de costos notorios y con una proyección de vida útil de no mas de cuatro años, con “parches y eventos” a lo largo del trayecto. Cuando destacaba el punto de accesibilidad y conectividad ciertamente no estaba asumiendo que tanto el acceso a la comuna de Arauco (rotonda que solo el diseñador debe entender), los retornos a Carampangue o la impresentable rotonda de Cerro alto, la exclusión de acceso a Laraquete de cuerdo a la proyección turística de nivel regional que ostenta, el inexplicable acceso a Ramadillas, sólo por indicar algunos.

La seguridad es paupérrima, con sectores sin reflectantes, señaléticas inadecuadas, mucho menos visibles, no se consideró iluminación de acuerdo las características climáticas de la provincia, como lluvias o niebla. Es cuestión de ver la cantidad de accidentes entre Ramadillas y Cañete. Este resumen, bastante acotado, se suma al inexplicable y nefasto hecho, pero de gran preocupación para la empresa, de contar con tres peajes construidos y finalizados antes que cualquier otra obra, sí, tres peajes en un ruta que une a la provincia de Rezago de Arauco, que ostenta cinco de sus siete comunas con un porcentaje de pobreza por ingreso, sobre el 29%, siendo Cañete la comuna más pobre del país, según Casen, comuna que irónicamente deberá pasar por los tres peajes para conectar con el Gran Concepción.

Ni desarrollo, ni crecimiento, ni mayor accesibilidad han resultado de esta construcción. Mucho menos preocupación por la autoridad (MOP), la cual en 2016 condicionó el aumento del cobro en el peaje, a la finalización de un puente (Ramadillas) y no a la calidad de la misma, ni al cumplimiento de lo que se contrato y por lo cual se lleva cobrando ya mucho tiempo. Cobro que afecta a miles de personas, en el aumento de los pasajes de locomoción, aumento de los costos de insumos, y por sobre todo una vez más aumento en la exclusión y poco compromiso con una provincia por años olvidada, que solo figuraba en las noticias por derrumbes de carreteras y atentados.

Ya es tiempo de que las provincias más pobres y olvidadas sean objeto de un mayor respeto, reconocimiento e inversión que se merecen.

Erik D. Gonzalez Gayoso

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