Señor Director:
La respuesta a esta pregunta hay que buscarla en la capacidad de internalización que tengan las compañías con respecto al avance de las tecnologías de la información y de cómo esta ha transformado su tradicional apoyo desde una figura en el back office a una posición que impacta directamente al negocio siendo relevante y base fundamental en el front office.

Si observamos lo que está ocurriendo en el mundo, veremos otra realidad. La International Data Corporation (IDC) pronostica que el gasto mundial en transformación digital superará los US$1.2 billones durante este año, un 17,8% más que el pasado año. El estudio señala que se seguirá creciendo hasta 17,9% de aquí a 2020, año en el que se alcanzarán los 2 billones de dólares.

Hemos avanzado, pero aún estamos lejos de internalizar el impacto de las tecnologías en el negocio tal como lo han visualizado países que destinan buena parte de su presupuesto en tecnología. La ventaja que estos países tienen sobre Chile es que son ellos los que han invertido en la investigación y desarrollo de esta transformación digital y, al mismo tiempo, implementado estas tecnologías en la práctica.

Más allá de un cambio cultural, creo necesario, que en Chile nos atrevamos a implementar, de manera objetiva y planificada, las tecnologías que pudieran impactar el negocio. Si estamos ante una oportunidad de potenciar ingresos, disminuir costos o aumentar la rentabilidad, no debiera ser un tema cultural el que impulse a realizarlo, sino una decisión estratégica de negocios que debe ser explorada.

Javier Silva

Gerente general consultora TI Vector