La directora universitaria de Género, Lucía Saldaña, cifró en un 90% la concordancia de las partes respecto al petitorio. En cuanto al protocolo, se prevé su liberación este semestre.
Ayer se cerró la mesa de trabajo entre autoridades de la Universidad de Concepción y las estudiantes autoconvocadas de la casa de estudios, quienes el pasado semestre -al igual que a nivel país- desarrollaron una extensa movilización en pro de la educación no sexista.
La instancia se concentró en el análisis del petitorio construido por las alumnas UdeC, texto que se orientó en base a tres ejes: funcionamiento de la Dirección de la Equidad de Género y Diversidad, hacia una educación no sexista y madres, padres, tutoras o cuidadoras.
En cuanto a los resultados de la negociación, la directora universitaria de Género, Lucía Saldaña, indicó que “terminamos una etapa de mesa de trabajo, luego de cinco reuniones, para terminar de trabajar el petitorio. Estamos muy satisfechas, porque lo hemos resuelto íntegramente, de manera muy satisfactoria, con un diálogo muy fluido (…). Abordamos todo el petitorio y creo que se estableció acuerdo en alrededor del 90% de los temas”.
Respecto a los principales asuntos zanjados, Saldaña comentó que “primero, vimos los plazos y cuáles son los organismos competentes para este abordaje. Por otro lado, logramos avances sustanciales en la transversalización de la perspectiva de género, educación no sexista, medidas tendientes a la certificación de la norma chilena, entre otros”.
Finalmente, sobre uno de los puntos más sentidos de la movilización, que guarda relación con las medidas en caso de acoso, abuso o discriminación al interior del plantel, la directora de Género recalcó que “se avanzó muchísimo”.
“Por un lado, las estudiantes han avanzado en su conocimiento de cómo se trata este tema y, por lo tanto, hoy pueden ver que en el petitorio hay planteadas cosas no en la forma adecuada, en términos del debido proceso. Hay un aprendizaje respecto de todo el equipo de trabajo en cómo se llevan adelante las investigaciones en materia de acoso sexual, violencia de género y discriminación”, agregó.
Consultadas, las estudiantes participantes de la mesa destacaron el trabajo y abogaron por seguir adelante con las tareas. “Nosotras como mujeres autoconvocadas hacemos un llamado a seguir fiscalizando y viendo el cumplimiento de lo que aquí se acordó. Esto no es un punto final a nuestro trabajo como feministas, sino que es parte de un proceso. Estamos felices porque vemos que en la universidad se están dando cambios”, sentenciaron.
La construcción del protocolo de actuación en caso de acoso, violencia de género y discriminación, se encuentra muy adelantado, subrayó Lucía Saldaña.
En ese marco, señaló que al borrador presentado resta sumarle observaciones de las facultades. “Luego la versión final se enviará al servicio jurídico, en un mes más. Posteriormente, tiene que ir al Consejo Académico y ser aprobado por él”.
Requerida por los plazos, Saldaña afirmó que de aquí a fin de año el texto debería estar operativo.